El consejero anuncia un plan de educación ambiental destinado a los jóvenes de la región

El Plan Regional de Educación Ambiental estará dotado con un millón y medio de euros y tendrá una especial dedicación a los municipios de Yeste, Molinicos y Riópar, en Albacete. Así lo ha anunciado el consejero de Agricultura, Medio Ambiente y Desarrollo Rural de la Junta, Francisco Martínez Arroyo. 

El consejero ha aprovechado para anunciar esta actuación su visita a la zona donde se realizan labores de reforestación tras el incendio en Yeste de este verano, en un acto al que ha acudido junto al presidente de la región, Emiliano García-Page. Martínez Arroyo ha explicado que el Gobierno regional invierte 700.000 euros en restaurar lo que se quemó en esta zona a través de varias acciones de reforestación.

Ha detallado que los trabajos se han iniciado "con las reparaciones de los caminos dañados en la extinción del incendio, la recogida de madera para aprovechamiento de biomasa y para la construcción de diques de contención para evitar la erosión del suelo cuando lleguen las lluvias".

Tal y como ha señado Martínez Arroyo, estas actuaciones iniciales del plan de restauración de la superficie afectada en los términos de Yeste, Molinicos y Riópar suponen una inversión de 693.426 euros y están coordinadas "en su totalidad" por la Consejería que dirige, con la participación de la empresa pública TRAGSA y de empresas forestales de la comunidad autónoma.

Intensos trabajos de recuperación

El presidente y el consejero han estado acompañados de la alcaldesa de Yeste, Cortes Buendía; la alcaldesa de Molinicos, Dolores Serrano; y el alcalde de Riópar, Federico Moreno; además del delegado de la Junta en Albacete, Pedro Antonio Ruiz; el presidente de la Diputación de Albacete, Santiago Cabañero; y el director provincial de Agricultura, Manuel Miranda.

Allí han podido comprobar "cómo se van cumpliendo los trabajos urgentes", entre ellos "el aprovechamiento y retirada de madera quemada, el apeo de biomasa quemada en fajas de seguridad y la ejecución de albarradas transversales con material vegetal quemado en barranqueras, así como actuaciones para la defensa del suelo", según ha informado la Junta. Para lograr estos objetivos y contribuir al desarrollo económico de la zona tras el incendio, la Consejería de Medio Ambiente ha indicado a TRAGSA que los trabajadores contratados para estas tareas tienen que proceder de los municipios afectados por el incendio.

El consejero, además de referirse a los trabajos de reforestación y repasar las actuaciones para favorecer las condiciones de vida de la fauna de la zona, también ha valorado "lo que han cambiado los tiempos y todo lo que se ha hecho en materia de prevención de incendios forestales en Castilla-La Mancha". En esta materia, los 2.000 trabajadores de la empresa pública de gestión medioambiental (GEACAM) son contratados durante todo el año y ha permitido incrementar en 3.000 el número de hectáreas en las que se han realizado labores selvícolas, con más de 8.300 hectáreas en total.

Escasez de agua

Martínez Arroyo también ha calificado de "dramática" la situación de escasez de agua del embalse de La Fuensanta. Desde su punto de vista "el agua no es sólo importante para la agricultura o el consumo humano, sino que es imprescindible para que el medio ambiente esté en condiciones". El titular de Agricultura del Gobierno regional ha vuelto a tender la mano al Ministerio de Agricultura y al Gobierno central para "desarrollar estrategias entre todos para el conjunto del Estado".