Page, Tirado y Serrano no faltan a la corrida de Asprona en Albacete
La corrida a beneficio de Asprona, la Asociación de Atención a Personas con Discapacidad Intelectual o del Desarrollo y sus Familias en la provincia de Albacete, se saldó con un rotundo éxito, tanto en el ruedo como en el palco de autoridades. Y es que nadie se quiso perder un evento al que acudieron el presidente de la Junta, Emiliano García-Page, el secretario del PP en la región, Vicente Tirado, y el alcalde de Albacete, Manuel Serrano.
Todos ellos coincidieron en la importante labor que realiza este colectivo en favor de las personas con discapacidad intelectual. Un trabajo que, además, viene asentado por la dilatada trayectoria que atesora la asociación. No en vano, la corrida, que se saldó con dos orejas como trofeos para los diestros, va camino de las 50 ediciones y volvió a obtener la respuesta del público albaceteño.
Dos orejas
Una oreja cada uno pasearon este sábado Cayetano Rivera y López Simón en la 48 edición de la corrida a beneficio de Asprona (Asociación de Atención a Personas con Discapacidad Intelectual o del Desarrollo y sus Familias en la provincia de Albacete), tarde condicionada por el escaso juego de los toros de Las Ramblas.
Pero en el país de los ciegos hubo un tuerto que fue el rey, el segundo, al que Cayetano cortó una oreja tras cuajar la faena de mayor entidad de la tarde, destacando las series al natural, reposadas, templadas y ligadas. El pinchazo previo a la estocada final dejó el premio en singular.
El quinto, en cambio, fue un manso que presentó muchas dificultades al madrileño, que, sin embargo, no se arrugó, aunque en lo artístico no pudiera resolver nada ante un animal que embistió con la cara alta, defendiéndose y desentendiéndose también al final. No anduvo acertado aquí Cayetano con los aceros.
López Simón tocó pelo en su primero, toro sin raza, muy soso, con el que el joven madrileño tuvo que emplearse a fondo en una faena de menos a más, finalizada con alardes que calaron en los tendidos. La efectividad con la tizona fue crucial para la concesión del apéndice.
No pudo resolver, en cambio, con el manso y peligroso sexto, al que no volvió la cara López Simón, pero sin poder llegar a nada del otro mundo por lo poco que se prestó el de Las Ramblas, y lo mucho que desarrolló durante la lidia.
El rejoneador Pablo Hermoso diseñó una primera faena técnica y sobria, en la que destacó montando a "Brindis" en banderillas. Faltó contundencia con el rejón definitivo y fue ovacionado. Tampoco anduvo fino con el rejón de muerte en el cuarto, al que volvió a cuajar una faena de buen nivel, brillando esta vez sobre "Dalí".