Un "sí quiero" frustrado por el COVID-19 y un sector que cae en picado: ¿y ahora qué?
La crisis sanitaria del coronavirus ha dejado en el aire bodas, bautizos y comuniones que han tenido que aplazarse ante la imposibilidad de celebrar este tipo de actos que suponen grandes aglomeraciones.
Novios y padres se han visto obligados a posponer o cancelar estos eventos, una decisión que, además de afectarles personalmente, ha provocado numerosos daños económicos en empresas dedicadas a este sector que no saben cuándo podrán reanudar su actividad.
Bbc Senses, una empresa de Villarrobledo (Albacete) encargada de organizar eventos, se ha visto obligada a realizar un ERTE a cerca de 50 trabajadores. Además, el Hotel Casa Lorenzo - Finca Las Beatas, donde se celebran estos actos, se puso a disposición de los sanitarios desde el primer momento.
Francisco Javier Calero, director comercial de Bbc Senses, ha comentado que "la agenda estaba llena desde el mes de abril, pero cuando empezó esta crisis, la gente comenzó a posponer bodas y comuniones para mitad de año".
Aunque la primera boda programada es para finales de agosto, la mayoría de novios ha aplazado la suya para diciembre e incluso para el próximo año. "En total se han suspendido 40 o 50 eventos y todavía está en el aire la fecha definitiva, pues son las parejas y padres los encargados de indicar los parámetros".
A partir del 11 de mayo, tanto el hotel como el restaurante volverán a abrir sus puertas siguiendo el protocolo recomendado y se incorporarán algunos trabajadores, pero el futuro es todavía incierto.
Anaflor y Paquito es una pareja albaceteña que se casaba en agosto, pero sus planes se han visto truncados sin esperarlo. Han tenido que posponer la boda y todavía no tienen claro si el próximo año podrá celebrarse.
Por suerte, el restaurante donde pensaban celebrar el enlace les ha ofrecido numerosas alternativas y siempre ha estado pendiente de ellos y tanto el fotógrafo como el cura no han tenido ningún inconveniente en esta decisión. Además, han tenido la posibilidad de cancelar su luna de miel.
"Nos ha afectado bastante porque es algo que planeas con muchísima ilusión y, una vez que das el paso, organizas todo y tienes las invitaciones preparadas, tener que cancelar todo es frustrante".
La pareja tiene pensado decir el "sí quiero" en agosto de 2021 y espera que para entonces "ya exista una vacuna que nos haga olvidarnos del coronavirus".
La pandemia del COVID-19 ha chafado los planes de numerosas personas y un negocio valorado en unos 3.500 euros anuales, donde se concentran multitud de negocios de restauración, floristería, fotografía o viajes. No obstante, solo queda cruzar los dedos y esperar que, poco a poco, todo vuelva a la normalidad.