El Hospital de Hellín participa en un programa para mejorar su Unidad de Cuidados Especiales

La Gerencia de Atención Integrada de Hellín, dependiente del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha, se ha unido al Programa Sumamos Excelencia, una iniciativa que consiste en la implantación de recomendaciones de buenas prácticas, en este caso sobre la valoración y manejo del dolor en la Unidad de Cuidados Especiales (UCE).

Esta iniciativa, impulsada por Investén-ISCIII y el Centro Español para los Cuidados de Salud Basados en la Evidencia (Cebce) del Instituto Joanna Biggs, se prolongará durante un año con el objetivo de implantar una serie de sugerencias que serán auditadas y evaluadas. Una vez acabado el periodo y de forma progresiva, se procurará trasladar estas medidas al resto de unidades del hospital, según ha informado la Junta en nota de prensa.

El uso de guías de buenas prácticas o recomendaciones basadas en la mejor evidencia disponible provenientes de la literatura científica permite integrar los resultados de la investigación a la práctica clínica habitual, "lo que redunda en beneficios para el paciente en primer lugar", según ha explicado el líder del proyecto y supervisor de la UCE, Ramón Azor.

Además, es igualmente positivo e importante para la propia organización, ya que "invita a trabajar con eficiencia", así como para los profesionales, porque "evita la variabilidad en los cuidados aplicados".

Iniciativa propia

La idea de participar en esta iniciativa surgió del propio colectivo enfermero del hospital y ha contado con el apoyo y colaboración de la Dirección de Enfermería y la Gerencia, así como con el asesoramiento y la coordinación del Host regional de Castilla-La Mancha.

Para la implantación del proyecto se ha formado un equipo voluntario de cinco profesionales de enfermería de la UCE, quienes, tras la formación obligatoria respecto a métodos y estructura, serán los encargados de instaurar las buenas prácticas y de enseñar al resto de la plantilla para asegurar la correcta adhesión a las mismas.

A partir de ese momento se obtendrán resultados del funcionamiento del programa cada tres meses y así se podrá analizar la mejora de la práctica clínica mediante la introducción de estas recomendaciones que optimizan la atención a los pacientes.