Extremadamente violento. Así se ha mostrado en la Audiencia Provincial de Albacete D.M.C., el hombre acusado de agredir brutalmente a otro de 47 años, al que no conocía de nada y con el que no intercambió palabra alguna, el pasado 25 de noviembre de 2021 en un hipermercado de la capital albaceteña.
Con el culo de una botella de cava que cogió de un expositor del Alcampo del centro comercial Imaginalia, impactó reiteradamente en la parte posterior de la cabeza de su víctima, que actualmente se desplaza en silla de ruedas a consecuencia de las graves lesiones provocadas.
Ahora, 14 meses más tarde, los gravísimos hechos están siendo juzgados y el agresor podría enfrentarse a una pena de 15 años de cárcel si es condenado por intento de asesinato.
Durante la sesión celebrada este lunes en la sección segunda de la Audiencia, el acusado se ha abalanzado sobre uno de los testigos, el hijo de la víctima, que acompañaba a su padre en el hipermercado cuando sucedieron los hechos.
Según informa CMMedia, el procesado ha intentado echarle las manos sobre el cuello tratando de estrangularle con sus esposas, algo que han impedido los cuatro agentes de la Policía Nacional que le custodiaban. Mientras que tres de ellos le han tirado al suelo y reducido de inmediato, el cuarto ha protegido al resto de los presentes, a los que ha gritado "échense para atrás", según puede verse en las imágenes de la televisión autonómica castellano-manchega.
La sala ha tenido que ser desalojada durante algunos minutos y el juicio ha sido suspendido momentáneamente, aunque se ha reanudado poco después, cuando la seguridad de todos los presentes ha quedado garantizada.
El hijo persiguió al agresor
Fue precisamente el hijo del agredido el que persiguió al procesado hasta el aparcamiento del centro comercial después de que su padre fuese brutalmente golpeado. Allí, con la colaboración de la seguridad privada del establecimiento, lograron retener al agresor hasta que llegó la Policía Nacional y procedió a su detención.
La víctima, durante su comparecencia ante la sección segunda de la Audiencia Provincial de Albacete, ha asegurado que no conocía de nada a su agresor y le ha preguntado: "¿Por qué quería matarme? ¿Por qué me ha dejado en una silla de ruedas?". Tras el episodio pasó varios días en coma a causa de una fractura craneal y tuvo que ser intervenido quirúrgicamente en cuatro ocasiones. Hoy por hoy, desde la silla de ruedas en la que se desplaza, asegura que está "muy mal; como un bebé".
El procesado, por su parte, se ha negado a declarar y a someterse a un examen psiquiátrico. Según CMMedia, durante el tiempo que lleva en prisión provisional a la espera de juicio ha agredido a varios funcionarios.