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Ciudad Real POSIBLE ASALTO DE LA GUARDIA CIVIL

El hombre atrincherado en Manzanares no depone su actitud tras 8 horas de negociación

21 marzo, 2018 19:44

El propietario de un mesón de Manzanares (Ciudad Real), que está atrincherado con una escopeta en el interior de su establecimiento desde esta mañana, mantiene su actitud después de varias horas de negociación con la Guardia Civil, que evalúa la posibilidad de asaltar el local.

Según han informado a Efe fuentes policiales, el hombre, que tiene 58 años de edad, no cede en su actitud y sigue dentro del mesón 'Sancho' armado con una escopeta.

Asimismo, las fuentes policiales han explicado que ante la actitud del atrincherado se está analizando la posibilidad de asaltar el establecimiento por parte de los agentes de la unidad especializada de la Guardia Civil de Valdemoro (Madrid), que se han trasladado a Manzanares.

Fuentes municipales han indicado que el hombre se ha atrincherado en el interior de su establecimiento, situado en la calle Jesús del Perdón, desde las 10:41 horas, y han apuntado que antes de encerrarse en el local habría echado a su padre, que vive en el inmueble, y a un hermano.

Motivo posible 

Estas mismas fuentes han apuntado que debía comparecer hoy en los juzgados por un robo que sufrió en su local hace un año y por el que estaba imputado, ya que se sospecha que pudo estar implicado en el mismo.

Estos hechos por los que, al parecer, debía comparecer en los juzgados en calidad de imputado ocurrieron el 15 de marzo de 2017, cuando los empleados del mesón alertaron de que, de madrugada, una o varias personas que llevaban un arma blanca habían atracado el local y se habían apoderado de la recaudación.

La calle principal que da acceso al mesón permanece cortada y las calles adyacentes acordonadas por parte de los agentes que están participando en el dispositivo que se ha montado a consecuencia del incidente.

En el despliegue participan más de una veintena de agentes de la Guardia Civil y de la Policía Local de Manzanares, entre ellos varios francotiradores que vigilan el mesón desde los tejados de las viviendas colindantes.