Miles de personas han acompañado este domingo a la virgen de Alarcos en su subida a la ermita que lleva su nombre, en Ciudad Real, cumpliendo así con la devoción de peregrinar junto a ella en el recorrido que la lleva desde la ciudad hasta el lugar donde este lunes 20 de mayo se celebrará la romería en su honor.

Tras la tradicional eucaristía, celebrada en la iglesia de San Pedro, la imagen de la virgen de Alarcos ha recorrido varias calles de la ciudad transportada inicialmente en andas por hermanos de la Cofradía de la Flagelación y posteriormente, desde la Parroquia de Santo Tomás de Villanueva, ser llevada por una reata de mulas llegada desde Tomelloso, ha informado el Ayuntamiento de Ciudad Real este domingo en nota de prensa.

El alcalde de Ciudad Real, Francisco Cañizares, ha encabezado la romería, acompañado por la concejala de Festejos, Fátima de la Flor, por numerosos miembros de la corporación municipal, así como por la presidenta de la Federación de Peñas y de la Hermandad de la Virgen de Alarcos, Frasi López.

A la llegada a la ermita, el alcalde de Ciudad Real ha comentado a los medios de comunicación que "esta es una romería de Ciudad Real, pero también de sus pedanías y de su comarca, que tiene en este cerro sus orígenes" y se ha mostrado muy satisfecho por el hecho de que miles de personas hayan decidido acompañar andando a la virgen en su recorrido hasta el cerro de Alarcos, desde el que se divisa una gran panorámica del valle del río Guadiana.

Los bailes regionales de los grupos del XXV Festival Nacional Folclórico Virgen de Alarcos, provenientes de Asturias, Extremadura, Villarrubia de los Ojos y el anfitrión, Virgen Del Prado de Ciudad Real, han cantado y bailado a la que es la patrona de la pedanía ciudadrealeña de Valverde, en la puerta de la iglesia de Santo Tomás de Villanueva, desde donde ha iniciado el camino en la reata de mulas.

Tras la tradicional subida de la virgen, en carrera por la última cuesta del cerro de Alarcos a hombros de los romeros de Valverde, los devotos han acompañado a su virgen hasta su ermita, donde le han cantado, bailado y dedicado varias ofrendas de flores, con gritos de '¡Viva la Virgen de Alarcos!'.