El despiste de un ganadero de la región permite a los lobos ponerse las botas
El ataque del lobo ha dejado a 15 corderos muertos y dos terneros muertos en el municipio de Cantalojas, en la Sierra Norte de Guadalajara.
En concreto, el ganadero Antonio Arenas ha sido el afectado por el último ataque del lobo con resultado de 14 corderas y un macho muertos, y diez desaparecidas, "además de cinco heridas de las que, seguramente, tres se mueran", ha señalado a Efe este ganadero que señala que el ataque tuvo lugar en la madrugada del lunes al martes.
"Tenía a un grupo de unas 300 separadas de las madres en unos prados, me despisté y debieron salirse alrededor de 35 que fue las que eché de menos a la mañana siguiente cuanto las conté", ha explicado Arenas, que cuenta con 2.000 cabezas de ganado.
Ha relatado que "de inmediato" se fue en busca de los animales al lugar donde creía podían estar y se encontró a muchas ya muertas y que se las estaban comiendo los buitres.
Los forestales acreditaron que habían fallecido por ataque de lobo y al tenerlas aseguradas ha podido reclamar al seguro, si bien señala que gracias a que tiene 28 mastines los animales están protegidos.
"Si llegan a estar dentro con los perros no les atacan pero al escaparse ya se encuentran desprotegidas", ha concretado Antonio Arenas, quien ha concluido que otros dos ganaderos de la localidad perdieron recientemente dos terneros que han aparecido muertos también por el ataque del lobo.