Brutal bronca en el Senado con un parlamentario de Castilla-La Mancha entre los protagonistas
Los senadores del PP que asisten al pleno de la Cámara Alta han abandonado el hemiciclo en protesta por los insultos lanzados desde la tribuna por el senador de Más Madrid Eduardo Fernández Rubiño, quien ha reprochado al PP que en algunas autonomías gobiernan con el apoyo de los "fascistas" de Vox.
"No se puede tener la mano tan larga y la piel tan fina, no se puede llamar terrorista a sus oponentes políticos y al día siguiente rasgarse las vestiduras cuando gobiernan con los fascistas", ha sido la frase del senador madrileño que ha desatado una monumental bronca ante la indignación del grupo popular, cuyos senadores le han interrumpido con gritos y protestas.
Los reproches de Fernández Rubiño venían a cuento de otro incidente ocurrido horas antes, en la sesión de control por unas palabras de la senadora Sara Vilà, quien al recordar las protestas antirracistas en EEUU pidió a Vox y al PP que "tomen nota que la gente nunca más bajará la cabeza ante el fascismo y el racismo".
El portavoz del PP, Javier Maroto, pidió a la presidenta de la Cámara, Pilar Llop, la retirada de esas palabras del diario de sesiones al entender que había acusado de fascista al PP, pero ella rechazó tal posibilidad.
El asunto ha vuelto a la palestra cuando Eduardo Fernández Rubiño ha tomado la palabra para fijar la posición del grupo de Izquierda Confederal ante una proposición de ley de ERC para reformar la Ley contra la Violencia, el Racismo, la Xenofobia y la Intolerancia en el Deporte a fin de erradicar la homofobia y la transfobia.
Las voces y gritos desde la bancada del PP provocadas por los insultos del senador de Más Madrid han obligado a la presidenta a pedir calma y advertir varias veces a los senadores de que no le obligaran a llamarles al orden, cosa que finalmente ha hecho, en dos ocasiones, al senador guadalajareño AntonioRomán Jasanada(la presidenta ha tenido que preguntar su nombre a un miembro de la Mesa). El exalcalde Guadalajara ha sido el más activo en la protesta que se quejaba sin parar de que Fernández Rubiño les había llamado "fascistas".
Javier Maroto ha intentado tomar la palabra, pero Llop no se lo ha permitido, al tiempo que la presidenta insistía en pedirles respeto al orador y les rogaba que guardaran "el debido decoro". Todo ello sin que cesara el alboroto y las protestas de los miembros del grupo popular, muchos de ellos puestos en pie, que no paraban de gesticular y señalar al senador de Más Madrid exigiéndole "¡que lo retire!, ¡que lo retire!".
Aunque la presidenta no ha llegado a llamar al orden por tercera vez al senador Jasanada, lo que habría supuesto su expulsión del hemiciclo, y viendo el portavoz del PP que la presidenta emplazaba al orador a seguir su discurso, finalmente ha ordenado la marcha de su grupo del salón de plenos. Se han marchado después de que el senador de Más Madrid haya vuelto a recordarles que "gobiernan" en varias comunidades, como Madrid, con un partido como Vox, al que el líder del Ku Klux Klan "felicitó", ha puntualizado levantando la voz, cuando entraron en el Parlamento de Andalucía.