El director de la Academia de Infantería de Toledo defiende el papel del Ejército

El director de la Academia de Infantería de Toledo, el coronel Francisco Javier Marcos, afirma que la sociedad debe conocer que la mejor forma de defenderla es tener unas Fuerzas Armadas eficaces y sostiene que la defensa y la seguridad no es lo mismo, pues "para estar seguro, hay que estar defendido".

En una entrevista concedida a la Agencia Efe, el coronel Marcos apunta que el papel que tiene el Ejército de Tierra a día de hoy, junto con el Ejército del Aire y con la Armada, es que "tienen que estar listos para defender los intereses de España allí donde se vean agredidos o puedan estar en peligro".

En este sentido, apuesta por trasladar a la sociedad el mensaje de que "la mejor forma de defenderla es disponer de unas Fuerzas Armadas eficaces".

"Si somos capaces de estar bien defendidos estaremos seguros", expone el coronel Marcos, quien explica que seguridad y defensa no es lo mismo, ya que "para estar seguro hay que estar defendido" y cuando se tenga defensa y seguridad, se puede tener estabilidad, a partir de la cual se produce el desarrollo.

Por ello, asegura que "en la base de todo está la defensa y están las Fuerzas Armadas", entre ellos el Ejército de Tierra.

En este sentido, subraya que son los miembros del Ejército de Tierra quienes están entre la gente en las zonas de conflicto.

"No es ni más ni menos que otros ejércitos, es una responsabilidad distinta con un matiz especial, porque el factor humano va a condicionar mucho más todavía el futuro en las operaciones", explica el coronel Marcos.

Papel fundamental del Ejército

Asimismo, afirma que a día de hoy, con un ambiente "tan volátil, tan incierto, tan complejo, tan ambiguo" como el actual, en el que se viven "acontecimientos que sorprende, semana a semana, en lugares aparentemente seguros", el papel del ejército "como elemento que garantiza esa seguridad, es fundamental".

"No podemos descartar que llegue un día que se requiera la presencia del Ejército para afrontar el azote del terrorismo yihadista o cualquier otra manifestación y que el Gobierno evalúe la necesidad de una participación", apunta el coronel Marcos, que recuerda, por otro lado, que la participación del Ejército está contemplada en los niveles de alerta.

En cualquier caso, y aunque no esté activado el nivel de alerta que incluye la participación del Ejército, el coronel Marcos insiste en que "el Ejército de Tierra tiene que estar preparado para actuar contra el terrorismo, ya sea dentro o fuera de España" y añade que si llega un día en que el Gobierno considera su participación, el Ejército de Tierra tiene que estar "disponible, listos y preparados para actuar".

Y en cuanto a los retos a los que se enfrenta la Infantería en la actualidad, expone que son tres, el primero de ellos saber formar líderes en todos los niveles de mando, "con iniciativa, que sean capaces de automotivarse y motivar a los demás, gente con espíritu de sacrificio, con capacidad para dar ejemplo y ponerse al frente de un grupo de soldados que van a tener que ser una piña con el para cumplir la misión".

El segundo reto es saber organizarse de modo que sepa adaptarse a cualquier tipo de conflicto que venga en el futuro, porque "los conflictos han cambiado", pues antes se sabía "quién era el enemigo, que estaba en un sitio y se le podía hacer frente porque se sabía quiénes eran y dónde estaban".

"Las operaciones han cambiado"

En relación con este aspecto, el coronel Marcos explica el tercer reto, que pasa por "asumir que las operaciones han cambiado", ya que, por ejemplo, ahora se dan en entornos "súper poblados", donde las comunicaciones son fáciles y "ya no son batallas en el campo abierto, de unos contra otros".

En este sentido, avanza que "posiblemente, el conflicto del futuro esté en zonas urbanas", un extremo en el que la Infantería "juega un papel muy importante", porque "están pisando el terreno" y de ahí la importancia de mentalizar a los mandos de que el "ambiente operacional ha cambiado".

Y todo ello, con un "reto permanente", que pasa por mantener el grado de preparación que actualmente se tiene en España, si bien "no solo es estar preparados, sino estarlo en el menor tiempo posible para actuar cuanto antes" en el momento en que se requiera.