Pillado in fraganti el grupo de atracadores de la caca de perro: habían actuado en Toledo, Albacete y Guadalajara
La Policía Nacional ha detenido a los cinco miembros de una banda criminal cuando uno de ellos acababa de robar en una sucursal bancaria de Cartagena aprovechando que otro de los integrantes había logrado captar la atención y distraer a los clientes, empleados y al director de la oficina formando un "alboroto" en el interior y dejando caer un excremento de animal.
De esta forma, la Policía Nacional ha procedido al arresto de los implicados a los que se les imputan ya quince hurtos en numerosas provincias de toda España, y los cinco han sido ingresados en prisión por orden de la autoridad judicial, según informaron fuentes del citado Cuerpo en un comunicado.
Durante los últimos meses, investigadores de la Policía Nacional pertenecientes a la Comisaría de Cartagena, en base al conocimiento de las diferentes modalidades delictivas llevadas a cabo en esa localidad, han realizado controles rutinarios en las inmediaciones de entidades bancarias, sobre todo en aquellas oficinas cercanas a la autovía que puedan constituir una vía de huída rápida para posibles atracadores.
Hace unos días, agentes policiales detectaron la presencia de siete personas de nacionalidad sudamericana, distribuidas en dos vehículos, realizando distintas pasadas frente a una sucursal bancaria. Entre los ocupantes se pudo identificar a un individuo, autor de un hurto de 7.000 euros acaecido este pasado mes de junio sobre una persona de avanzada edad por el procedimiento de la mancha.
Reparto de papeles para escenificar un alboroto
Este grupo, tras dejar sus vehículos estacionados en doble fila, procedió a entrar de forma escalonada en la citada entidad bancaria. Formaban un grupo totalmente heterogéneo: uno de traje corbata, otro con ropa deportiva y gorra, un hombre de avanzada edad, un chico joven, una mujer, otro con coleta y melena larga.
Todo ello, con la finalidad de evitar que los trabajadores de la sucursal se percatasen de que se trataba de un grupo organizado, perfectamente coordinado y con un buen reparto de funciones.
Una vez en el interior, cada uno se distribuyó por la entidad desempeñando un rol diferente de modo que, cuando uno de ellos pudo ser asistido en el despacho del director, otro formó un alboroto cerca de la puerta, donde uno de ellos previamente había dejado caer un excremento animal, según las mismas fuentes.
Con ello el grupo consiguió su objetivo, llamar la atención de trabajadores, clientes y del director de la sucursal mediante gritos de: "qué poca vergüenza, no hay limpieza, qué peste". Así la persona que se encontraba en el interior del despacho del director pudo moverse libremente por el mismo y hurtar todo aquello que el director hubiese dejado al descubierto. Tras conseguir su botín todos los integrantes salieron de la oficina en distintas direcciones.
El arresto de lo criminales
Los agentes de Policía Nacional dispuestos en las inmediaciones, ante la salida apresurada de los investigados, procedieron a su identificación inicialmente y finalmente a la detención de cinco de los mismos: tres colombianos, un mexicano y un cubano, todos ellos con edades comprendidas entre los 21 y los 61 años de edad.
La entidad bancaria afectada no ha podido valorar lo sustraído pero en las imágenes captadas del interior de la oficina se observa cómo uno de los delincuentes abandona la oficina con un paquete bajo su axila que no portaba cuando entró.
La Policía Nacional ha intervenido el vehículo que usaron los ladrones para su desplazamiento y también dinero en efectivo que portaban los arrestados en diversas monedas: euros, bolívares, pesos colombianos, dólar americano, rublos, reales brasileños, liras turcas, lek de Albania.
Habían actuado en Guadalajara, Toledo y Albacete
Este mismo grupo criminal presenta una gran movilidad geográfica ya que ha actuado en otras provincias españolas como Orense, Guadalajara, Toledo, Albacete, Bilbao, Lugo, Valencia, Cádiz, Córdoba, Lérida, utilizando distintas técnicas de engaño como la mancha, al descuido, la siembra o el cogotazo.
En su conjunto los arrestados presentan más de 25 detenciones anteriores y diferentes identidades falsas recogidas en las bases de datos policiales. En sus diferentes latrocinios la banda se ha hecho con distintos montantes: 64.000 euros en Guadalajara, 42.000 euros en Albacete, cerca de 13.000 euros en Toledo, 10.000 euros en Valencia, 7.000 en Cartagena (Murcia) y 5.000 euros en Cádiz
Además, cuatro de los detenidos se encontraban en situación irregular en territorio español y les constaban varias requisitorias judiciales, prohibición de entrada al Espacio Schengen por Italia y uno de ellos una extradición solicitada por Alemania. La autoridad judicial ha ordenado el ingreso en prisión de los cinco arrestados.
La investigación sigue abierta a la espera del esclarecimiento de nuevos hechos delictivos y la detención de otros miembros del grupo criminal. El operativo ha sido desarrollado por agentes adscritos a la Comisaría de Cartagena dependiente de la Jefatura Superior de Policía de la Región de Murcia.