Las lluvias que ha descargado el temporal durante este viernes en buena parte de Castilla-La Mancha, sobre todo en la parte más occidental, ha provocado diversas incidencias. La última ha sido el corte de la N-403, carretera que une Toledo con Ávila, como consecuencia de una balsa en la calzada.
Según ha informado el sevicio de urgencias y emergencias 112 de Castilla-La Mancha, la Guardia Civil cortaba la vía a las 19:11 horas de este viernes y no restablecía de nuevo el tráfico hasta la mañana de este domingo, en torno a las 10:00 horas, cuando la balsa ha podido ser achicada.
Una situación muy parecida se ha vivida en otra carretera cercana, la TO-1444, una vía de la red secundaria entre las localidades de Hormigos y El Casar de Escalona. En este caso, el corte al tráfico se ha producido a las 19:31 horas por el desbordamiento del arroyo La Celada.
Finalmente, a primera hora de este viernes el problema ha podido ser subsanado y la vía ha podido ser reabierta al tráfico.
La tercera carretera que se ha visto afectada este viernes por el temporal ha sido la CM-5150. En este caso, tenía que ser cortada sobre las 15:00 horas a la altura de Corchuela, una pedanía de Oropesa, también por el desbordamiento de un arroyo, el Alcañizo. Horas más tarde, quedaba de nuevo abierta.
En los tres casos no se han tenido que lamentar ni atrapados ni heridos.