El Ayuntamiento de Toledo da luz verde a la construcción de más chalés individuales en la urbanización Casa de Campo
- La propuesta, impulsada por la empresa 'Tolecampo N-401', busca cambiar el uso de una parcela comercial para construir más viviendas unifamiliares.
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El servicio municipal de Urbanismo del Ayuntamiento de Toledo ha informado a favor del Plan Especial de Reforma Interior (PERIM) de la urbanización de la Casa de Campo que permitirá la construcción de más chalés unifamiliares en una parcela que ahora tiene un uso comercial. El asunto llega hoy a la Comisión de Planeamiento previo a su sometimiento al trámite de información pública.
La urbanización Casa de Campo, ubicada apenas a 1,4 kilómetros de la entrada a Toledo es un núcleo residencial consolidado compuesto por viviendas de carácter unifamiliar. En la actualidad existen en este complejo 50 parcelas residenciales unifamiliares, de las que cuatro se encuentran aún sin construir, cuatro parcelas de uso terciario, otra de que alberga una zona deportiva privada y una más destinada a equipamiento público.
La propuesta, impulsada por la empresa Tolecampo N-401, quiere transformar el uso terciario de dos parcelas. Una de ellas tendrá uso residencial mientras que la otra se convertirá en zona verde. La decisión se fundamenta en la necesidad de vivienda que existe en la capital regional debido a la antigüedad del Plan General vigente y a la falta de demanda de usos terciarios en esta urbanización, dado que las parcelas afectadas por el PERIM han permanecido sin desarrollarse desde la aprobación del proyecto de reparcelación en 2022.
Chalés de una única planta
Las dos parcelas afectadas por el cambio de uso tienen una superficie de 4.798 y 951 metros cuadrados, respectivamente. La de mayor superficie será la que albergará los nuevos chalés, aunque su número concreto no queda fijado. Eso sí, las viviendas unifamiliares que se construyan tendrán una única planta. Este tipo de construcción busca mantener la coherencia con el entorno actual de la urbanización, que está compuesto en su inmensa mayoría por viviendas unifamiliares con características similares.
La parcela más pequeña se convertirá en una zona verde para compensar el aumento de la densidad residencial. El coste de urbanización de la zona verde será asumido por los promotores del proyecto y posteriormente será cedida al Ayuntamiento de Toledo, aunque su mantenimiento corresponderá a la entidad de conservación de la urbanización. El diseño propuesto incluye plantas de bajo recurso hídrico y revegetación de la zona con las especies existentes, así como plantaciones autóctonas de poco mantenimiento.
“Al mantenerse la edificabilidad actual y cambiar a un uso con un carácter de aprovechamiento inferior al del uso terciario actual no serán precisas las cesiones de para suelo dotacional público ni la cesión del porcentaje de participación pública en las plusvalías generadas por el incremento de aprovechamiento”, señala el informe emitido por la jefa del Área de Urbanismo del Ayuntamiento de Toledo.
El Plan Especial de Reforma Interior destaca la sostenibilidad económica de esta operación urbanística. El informe económico que le acompaña señala que la actuación no generará costes significativos para el Ayuntamiento de Toledo, pero sí un incremento apreciable de los ingresos municipales. Los cálculos realizados estiman que el Consistorio obtendrá unos ingresos de unos 60.000 euros por licencias urbanísticas e impuestos como el ICIO. A esta cantidad habrá que añadir otros 16.000 euros anuales en concepto de tributos recurrentes como el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI). Por contra, el mantenimiento de la nueva zona verde originará unos gastos de mantenimiento estimados en 3.000 euros anuales.