Así ha sido el entrañable regalo de Navidad de los taxistas a más de 50 mayores de Toledo

La alcaldesa de Toledo, Milagros Tolón, ha recibido este martes en la plaza del Ayuntamiento por segundo año consecutivo a los más de 50 mayores de las residencias de Azucaica y Parque de Gavilanes que han participado en la iniciativa solidaria organizada por los taxistas de la ciudad con el objetivo de acercar el alumbrado de Navidad a la Tercera Edad.

Milagros Tolón, que ha estado acompañada por diferentes concejales del Gobierno municipal, ha agradecido a la Asociación Local del Taxi y Radio Taxi la propuesta que ha calificado como "uno de los momentos más bonitos de la Navidad toledana" ya que permite a los mayores salir a disfrutar de la ciudad, "en la que muchos de ellos han nacido", deleitarse con los adornos y divertirse en compañía, ha informado el Ayuntamiento en nota de prensa.

La alcaldesa ha saludado y ha deseado felices fiestas a las personas que este año se han sumado a la iniciativa solidaria y ha cantado con ellos villancicos junto al tiovivo de la plaza del Ayuntamiento. Milagros Tolón también ha dialogado con los taxistas a quienes ha emplazado a repetir cada año esta significativa y entrañable labor para la que contarán siempre con el apoyo del Consistorio capitalino, ha dicho la regidora municipal, "porque la Navidad es más completa si la compartimos entre todos".

Este año se han sumado más taxis que el año pasado llegando a un total de 20 y también más mayores, en concreto, 54 personas de las residencias de Azucaica y Parque de Gavilanes. Los conductores de los vehículos los han llevado de manera gratuita por Toledo, entre ellos, ha participado el presidente de la asociación, Miguel Ángel Ortega.

Tras recoger a los asistentes en sus respectivas residencias, la ruta ha comenzado en la estación de tren de la ciudad y ha pasado por los puentes de San Martín y Alcántara, la avenida de La Cava, paseo de Recaredo, Reyes Católicos, Taller del Moro, plaza del Ayuntamiento, Hombre de Palo, Calle Comercio y Zocodover.

El trayecto, que ha sido coordinado previamente con la Policía Local para evitar los menores trastornos de tráfico a los usuarios, ha terminado en el quiosco Catalino con churros con chocolate ya que sus responsables también han querido participar en esta iniciativa.