La fiesta originada por una gran pandemia en Europa, nuevo Bien de Interés Cultural en Castilla-La Mancha
El Consejo de Gobierno de Castilla-La Mancha aprobará este martes la declaración de la fiesta del 'Santo Voto' de Puertollano (Ciudad Real), que tiene su origen en una pandemia que asoló Europa en el siglo XIV, como Bien de Interés Cultural Inmaterial del Patrimonio Español.
En un comunicado, la alcaldesa de Puertollano, Isabel Rodríguez,ha explicado que la viceconsejera de Cultura, Ana Muñoz, le ha avanzado que este martes se producirá esta declaración, de competencia regional y de ámbito de protección nacional, que supondrá un reconocimiento "a la generosidad de los puertollanenses", como se indica en el propio expediente, e implicará la preservación de esta manifestación cultural, y que se tome conciencia de su importancia.
La fiesta del Santo Voto, que desde 1999 tiene la catalogación de Interés Turístico Regional, consta de diferentes actos folclóricos y religiosos que acompañan a la actividad principal del reparto de un estofado entre miles de puertollanenses.
Tiene su origen en la promesa que hicieron a la Virgen, patrona del municipio, las trece familias supervivientes de una pandemia de peste negra que asoló Europa en 1348.
Medidas restricitivas
Las medidas restrictivas que se han decretado para frenar la actual pandemia de COVID-19 hacen que el habitual desarrollo del 'Santo Voto' se vea alterado este año, con el fin de reforzar las medidas de protección y seguridad de salud.
Este próximo 28 de mayo, esta fiesta tradicional cobrará un especial sentido ya que la actual situación es similar a la que sufrieron los vecinos de Puertollano setecientos años atrás.
Por ello que el Ayuntamiento haya optado por mantener un 'Santo Voto' simbólico y más reducido en participación que permita la continuidad de la fiesta más antigua de la ciudad a la vez que su protección, difusión y conocimiento como Bien de Interés Cultural (BIC).
Rodríguez ha agradecido al Gobierno de Castilla-La Mancha que esta fiesta "vaya a ser parte esencial del patrimonio de la región" y ha considerado que "vivir esta declaración en un momento como este, en una festividad tan relacionada con una pandemia, es algo que nos reconcilia con nuestra historia, con nuestra tradición y nos hace tener esperanza en nuestro futuro".