Un concierto de Sonora este sábado en la Catedral de Toledo que no hay que perderse
A través de un repertorio seleccionado para representar los momentos más álgidos de la narración de la Pasión, y poder conectarlo de la mejor manera posible, la joven agrupación de músicos Sonora, que ya sorprendió por sus peculiaridades en las navidades pasadas, volverá a ofrecer música a través del proyecto Immortalis, que tendrá lugar el próximo 20 de marzo en la Catedral de Toledo. El concierto es de entrada libre hasta completar aforo.
El concierto, titulado Immortalis, tendrá lugar a las 19:30h.El proyecto que presenta la agrupación unirá música y palabras para narrar, de una manera cercana y actual, el relato de la Semana Santa con el fin de llegar a todos los públicos.
Los integrantes de la formación son jóvenes músicos profesionales a punto de terminar su formación en el Real Conservatorio Superior de Música de Madrid, prestigioso centro público donde reciben formación en los campos de la composición, interpretación, gestión y tecnología musical, y de diferentes Conservatorios Profesionales de Madrid.
La agrupación, que ha mantenido un estricto protocolo de protección para mantener la higiene y seguridad de sus múltiples integrantes, es un ejemplo de constancia y esperanza para la cultura madrileña en tiempos de la covid-19.
Nada parece poder parar a la familia musical que surgió en 2019 en torno al Real Conservatorio Superior de Música de Madrid. Tan solo unos meses después del éxito de público en las pasadas Navidades, emprende este proyecto de Semana Santa que llevará a diferentes ciudades. Y no parece ser casual, ya que, tras ello, se encuentra el trabajo de múltiples jóvenes que se han formado profesionalmente en los campos de la interpretación, composición, gestión y tecnología musical.
Presentan una experiencia única e innovadora para el público, renovando el concepto de concierto habitual, combinando palabra, emoción y música. Un actor narra, acerca y actualiza el relato bíblico de la Semana Santa a todos los públicos, con el único fin de emocionar y conectarlo con la música. Textos bíblicos y música clásica, dos campos que a pesar de su valor, resultan tan poco atractivos para gran parte de la población, pero que se combinan y se renuevan para generar una experiencia explosiva, conectándolos y actualizándolos desde la perspectiva de acción social y difusión cultural hacia los jóvenes y el público en general que promueve Sonora.