Margarita del Val
La viróloga Margarita del Val señala la fecha clave: ocho semanas más
La viróloga Margarita del Val,una de las científicas más respetadas del CSIC, ha pedido a la población que aguante “ocho semanas más” porque, según ha explicado, luego “podemos plantearnos una nueva situación”.
“Pero tienen que estar vacunados todos los de riesgo, tenemos que seguir protegiéndolos”,ha explicado la experta en una entrevista en Catalunya Radio que recoge The Huffington Post. Después de esas ocho semanas, ha subrayado,“ya iremos viendo cómo va”.
Del Val ha insistido en que ya son solo unos meses, por lo que ha pedido aguantar ocho semanas haciendo un esfuerzo todos porque “ya se ve que esto va llegando”.
La viróloga da esa fecha, que es finales de mayo, porque se calcula que para entonces se habrán vacunado ya todos los grupos de riesgo. Pero, hasta entonces, ha insistido en que todos tenemos que seguir teniendo “mucho cuidado”.
También, ha advertido, las personas mayores de 80 años que están vacunadas y piensan que ya pueden abrazar a sus hijos. Según Del Val, eso es arriesgado porque, aunque a ellas no les afecte el virus, sí podrían contagiárselo a familiares mayores que tengan alguna patología.
“Hasta que no estén todos los de riesgo vacunados tenemos que tener todos paciencia”, ha repetido.
Por otro lado, la científica ha pedido a los españoles que se vacunen con la inyección que les toque porque “todas las vacunas que tenemos son muy buenas en cuanto a eficacia y en cuanto a seguridad, eso por supuesto”.
“Todas las vacunas nos bajan el destino de riesgo que tendríamos a uno mucho mejor. Las personas que iban a fallecer, una vacuna muy potente igual les coloca en una situación asintomática o de síntomas leves y una algo menos potente le coloca con síntomas moderados, pero en cualquier caso muchísimo mejor que fallecer, que UCI, que síntomas graves. Todas son buenas para todos”, ha recalcado.
“Que nadie espere otra vacuna, cuando a alguien le ofrezcan una vacuna que la acepte por favor”, ha rogado a los ciudadanos. Y ha pedido desterrar ese pensamiento de: “Vaya me ha tocado la mala, voy a esperar a ver si me llega la buena”.
