Pasiones y sueños de Santi Cañizares, un castellano-manchego solidario marcado por la tragedia
Tras perder a su hijo pequeño, Santi, por un tumor cerebral, el exfutbolista Santiago Cañizares, un castellano-manchego criado en Puertollano (Ciudad Real), afronta nuevos retos y pasiones en su vida.
5 septiembre, 2021 09:53Nacido en Madrid pero oriundo de la localidad ciudadrealeña de Puertollano, el exfutbolista y gran persona Santi Cañizares afronta sus nuevos sueños y pasiones en una vida, la suya, marcada por la tragedia, pero llena de amor y solidaridad.
Santi Cañizares acaba de aterrizar en Galicia. El que un día fue el portero de Real Club Celta de Vigo, vuelve a la tierra que le vio debutar en Primera División. Sin embargo, no son ni el fútbol ni la nostalgia los que le hacen regresar, sino el ciclismo y sus ilusiones de futuro. El mítico jugador del Valencia se encuentra durante este fin de semana en la localidad de Sanxenxo para asistir a la última etapa de La Vuelta Ciclista a España. Una causa solidaria lo une a la multitudinaria competición: ser embajador de la Fundación El Sueño de Vicky, una asociación sin ánimo de lucro cuyo objetivo es recaudar fondos para la investigación del cáncer infantil.
“Me satisface mucho representar a El Sueño de Vicky, porque considero que es una causa muy noble”, cuenta Cañizares. Como pilar de la organización, agradece el apoyo que le están brindando sus colaboradores. “Hemos establecido una sinergia con La Vuelta Ciclista a España. Trabajamos juntos para tener visibilidad y poder contribuir a la investigación para combatir el cáncer infantil”, comenta. El exfutbolista destaca también la labor del Celta de Vigo, que se ha involucrado en este proyecto benéfico. Con el equipo gallego, afirma tener muchos planes de futuro para programar actos y fomentar la solidaridad de las personas hacia la Fundación.
“Necesitamos dinero para hacer ensayos clínicos y seguir investigando”, comunica. El memorable guardameta de la Selección Española, hace también un llamamiento a los países desarrollados. “No se invierte en estudiar esta enfermedad, porque es considerada como rara”, asegura. Sin embargo, Santi Cañizares sabe lo que es asistir a una tragedia de la que nadie desea ser espectador, y menos aún protagonista. Tras perder a su hijo pequeño, Santi, de un tumor cerebral el pasado 2018, decidió embarcarse junto a su entonces esposa, Mayte García, en un camino de solidaridad cuya meta era evitar a otras familias el sufrimiento por el que ellos habían atravesado.
“Fue entonces cuando El Sueño de Vicky llegó a nosotros”, recuerda. “Su fundadora fue una de las personas que nos tendió una mano cuando sucedió lo de Santi”. El exvalencianista describe el orgullo que supone para él formar parte de esta red de apoyo, que desde el año 2017 teje lazos con las familias afectadas por el cáncer infantil. “Todos somos personas que hemos perdido a seres queridos. Nos sentimos en la obligación de tratar de solventar este problema dentro nuestras posibilidades, para que no lo vuelva a sufrir nadie más”, relata. Santiago Cañizares se siente ligado a su hijo a través de la solidaridad, pero este proyecto no es el único donde late el corazón del pequeño Santi.
Un canal para reflexionar y el campo de Puertollano
Hace tan solo ocho meses, el deportista comenzó una nueva aventura. Un primero de enero de 2021, creaba un canal de YouTube personal que se convertiría en una especie de diario íntimo. Si bien en un principio parecía que su contenido iba a tratar sobre análisis de fútbol y anécdotas de su pasado en la élite del balompié, pronto los suscriptores se vieron involucrados en una de las facetas que más llenan a Santi Cañizares: su amor por la naturaleza y su afición a la vida de campo. Su carácter afable y cercano, así como la pasión y sencillez con las que narraba su relación con la fauna y la flora que le rodeaban tras empezar una nueva vida en el rural, atrajeron hacia su proyecto de comunicación a seguidores ajenos al mundo del Deporte Rey.
“No pretendo ser distinto a nadie, simplemente pretendo ser yo”, relata. Para Santi Cañizares, ser él mismo significa hablar con fervor de sus pasiones: fútbol, automovilismo y, sobre todo, naturaleza. Siempre desde un prisma de humanidad y honestidad. Asentado en una finca dentro de uno de los parajes montañosos más hermosos de la Comunidad Valenciana, el madrileño ha retomado durante este último año su conexión con la vida campesina que ahora pretende compartir con sus suscriptores. “Me he criado en Puertollano, Ciudad Real, que es una zona donde hay muchísimo campo. He tenido un abuelo, que era cazador y amante de la naturaleza y me pasaba muchos días con él”, rememora.
De su abuelo, Felipe, Cañizares aprendió todo sobre la vida vegetal y animal. Sin embargo, pronto descubriría que sus vídeos cosechando, mostrando la vida salvaje o cuidando de las especies que residen en su granja eran una enseñanza para muchas personas, especialmente para los más jóvenes. “Me escriben muchos padres diciéndome que sus hijos alucinan con el canal”, sonríe. “A los niños les llama la atención saber que las gallinas ponen los huevos, y que de esos huevos salen pollitos”. Lo que en un principio sorprendió al de Puertollano, le invitó a hacer una reflexión sobre nuestro modo de vida. “Nos hemos alejado tanto de ese mundo que lo natural, lo que ha pasado siempre y es básico, nos parece algo extraordinario y hermoso”, explica.
Veintidós y veintitrés
Muchos fueron los motivos que llevaron a Santi Cañizares a implicarse de lleno en el cuidado y la gestión de una granja de gran tamaño. En el vídeo más visto de canal, titulado La historia de la Finca. ¿Cómo acabé aquí?, el exguardameta describe cómo su hijo Santi le mandó tres señales desde el más allá para adquirir aquel terreno en la sierra que le había enamorado. Señales que fueron inequívocas para él como persona creyente y en constante conexión con el alma de su pequeño. Las tres revelaciones, descritas con gran profundidad sentimental, estarían relacionadas con su abuelo Felipe, con el apellido Cañizares y, por último y más importante: con los números veintidós y veintitrés.
22 y 23 no son dorsales de fútbol, sino dos cifras que van más allá de lo deportivo, de lo futbolístico, e incluso de lo terrenal. Para la familia Cañizares, estos números significan un nexo de unión entre la vida en la tierra y en el cielo. Entre la llegada a este mundo y la ida hacia el paraíso celestial. Al menos desde el punto de vista de un hombre de fe como él. Un 22 de febrero de 2013, Santiago Cañizares y Mayte García asistían al nacimiento de sus trillizos: Martina, India y Santi. Esta triple alegría se sumaba a la de haber criado a otros cuatro retoños ya crecidos: Carlota, Lucas y Olivia, fruto del primer matrimonio del valencianista, y la pequeña Sofía, primera hija que tuvo con Mayte.
Una casualidad hizo que los nuevos miembros de la familia naciesen tan solo un día antes del cumpleaños de Olivia Cañizares. La hija de Santi Cañizares y Marina Conchello celebraba sus quince años el pasado 23 de febrero, evento que le hizo aparecer brevemente en el canal de su padre junto a sus hermanas Martina e India, aunque de manera virtual. En el vídeo 22 de febrero. Un día especial para mi familia, el 'youtuber' cuenta con gran entereza y cariño que un 23 de marzo el Santi niño de la familia falleció tras su larga enfermedad. “No se murió, se marchó un 23 de marzo”, resalta en la entrevista. “Por eso el 22 y el 23 son dos números que recorren mi vida desde entonces”.
El santuario de Cañizares
Cuando Cañizares habla de la finca en la que basa una gran parte de su contenido, lo hace describiendo aquel amplio lugar como un santuario donde acude en busca de paz. “La finca es muy importante para mí porque es el lugar en el que estoy en contacto permanente con mi hijo Santi”, se emociona. “Normalmente estoy solo, pero a veces me acompaña algún amigo”. El exportero menciona que no permite que cualquier persona entre a aquel lugar donde reposa el espíritu de su niño y donde siente la presencia y el calor de Dios. “Yo sé que Santi está cerca de mí siempre, pero allí en la finca más que en ningún sitio porque es donde yo encuentro la calma”, expresa.
“Mi finca es un santuario. Solo dejo pasar a almas limpias, con intenciones nobles”, continúa. Desde hace meses, Santi Cañizares se ha propuesto hacer de aquel terreno un lugar para asistir a la belleza de la vida salvaje. Su espiritualidad y su pasión por la cría de animales le han llevado a construir desde cero una especie de Arca de Noé donde ha decidido embarcar a especies domésticas como ocas, patos, gallinas, cabras y, por supuesto, “su perrina” tan querida. El guardameta, que se confiesa admirador del legado de Félix Rodríguez de la Fuente, también se relaciona a menudo con la fauna montés que le rodea, siempre desde el respeto por el ambiente.
“Félix Rodríguez de la Fuente tituló su programa El hombre y la tierra. Para mí, Dios ha creado la tierra para la humanidad y el animal, junto a las plantas, es su sustento”, opina. “El hombre tiene que ser el encargado de cuidar a los animales, de hacerles una vida plácida, de incentivarlos en su trabajo”, continúa. Una gran mayoría de los animales con los que convive a diario tienen nombres propios con los que el espectador se termina familiarizando. Ejemplos curiosos son una oca llamada Nata, dos gallos bautizados como Haaland o Mbappé, en honor a los dos futbolistas del momento, o incluso dos muflones salvajes que viven en libertad, pero que son alimentados por él, que han sido apodados afectivamente como Iago y Luna.
Entrevistas cercanas a famosos
Otro de los puntos fuentes del canal es la sección titulada “Charla con Cañete”. Con el propio Cañizares como entrevistador, diversos personajes relevantes del panorama nacional han acudido a este espacio para tener una conversación plácida con el valencianista. Una de las entrevistas más populares fue la de Iker Casillas, con quien compartió diversas anécdotas e impresiones que versaban sobre el pasado de ambos como porteros del Real Madrid, pero que también rozaron el lado más humano, familiar y amistoso del guardameta de Móstoles. Durante la conversación, no faltaron las risas, especialmente cuando el de Puertollano comentó que Casillas: “Tenía el coche más feo que haya podido ver en un futbolista”.
Diversos encuentros de gran éxito tuvieron lugar durante estos meses. Otras leyendas del balompié como David Villa o Iago Aspas se hicieron un hueco en el alma de los espectadores, mostrando su lado más humano gracias a la afabilidad de Cañete. Junto al fútbol y la naturaleza, el tercer pilar del proyecto es el automovilismo. Por ese motivo, Santi Cañizares quiso conducir hacia su canal a diversas personalidades del mundo del motor. La periodista Noemí de Miguel o el piloto de rally Carlos Sainz aparcaron a sus personajes para mostrarse de manera genuina.
“Muchos espectadores se sorprendieron de que consiguiese relajar a Carlos Sáinz. Traté de humanizar a Sáinz, que es un tipo de gran personalidad y lo conseguí”. Cañizares afirma que su objetivo es que la gente pueda conocer a sus invitados como si estuvieran tomándose un café con ellos. “Una de mis entrevistas más cercanas fue con Iker Jiménez”, comunica. No obstante, afirma que todavía tiene objetivos por cumplir. “Uno de mis sueños sería entrevistar a Amancio Ortega, porque me parece alguien por explorar y digno de admiración”.
El exportero, youtuber y actual comentarista de la COPE concluye su alegato filosófico narrando sus planes para un futuro en el que solo desea ser jugador de campo, en el sentido no futbolístico del término. “Soy una persona sencilla, que le gusta estar en contacto con la naturaleza. Lo único que quiero para el tercio que me resta de vida es estar tranquilo. Ya he tenido suficientes emociones. Porque en esta vida me han tocado todas las loterías, las buenas y las malas”.