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Corazón SE ENCUENTRAN EN UNA FIESTA

El hermano del famoso empresario toledano no le habla por culpa de su mujer

19 septiembre, 2019 07:00

La revistaHolacelebra estos días su 75 aniversario con una serie de fiestas en El Palacio de las Alhajas en Madrid, donde han convertido sus salones en La Casa Hola, con fotos de los protagonistas de estos 75 años del semanario, música, exposiciones y muchas actividades incluso benéficas.

Las estrellas más glamurosas de las páginas cuché se dieron cita en carne y hueso el jueves pasado en la primera de las fiestas. Al día siguiente, viernes, la fiesta tenía carácter solidario, en beneficio de la Fundación Intheos, que investiga el cáncer. Y contó con más nombres de primera clase, comoEsther Koplowitz y su ex marido Fernando Falcó,con quien la empresaria mantiene una excelente relación; Blanca Suelves, duquesa de Alburquerque;Norma Duval, Paz Vega, Carmen Lomana, Fiona Ferrer, Lydia Bosch, Irene Villa... También estuvo el empresario "toledano" Carlos Falcó, marqués de Griñón, con su esposa Esther Doña, que se marcaron unos bailes tipo flamenco que llamaron la atención.

Pero también llamó la atención que en la fiesta coincidieranCarlos Falcó y su hermano Fernando,con sus respectivas parejas, y que no se saludaran, ya que el salón principal del palacio no es tan grande y todo el mundo podía ver al resto de los invitados. "Está claro que Fernando yKoplowitzevitaron acercarse a Griñón y a Esther", comentaba a Informalia uno de los invitados que pudo observar la escena de cerca.

Tampoco es extraño que el marqués de Cubas marcara distancias con su hermano al ir acompañado deEsther Doña,a la que todos rechazan en la familia. Desde que el padre deTamara Falcómostró su intención de casarse con esa malagueña 43 años más joven, sus hijos y su hermano consideraron ese matrimonio un error. La verdad es que no se tratan.

Si en la familia quedaba alguna duda, la discusión del matrimonio el pasado mes de febrero en el hotel Eurobuilding de Madrid, que acabó con el marqués de Griñón detenido y en comisaría, fue la puntilla para que sus hijos, hermano y algunos amigos confirmaran que la gran historia de amor de Falcó y Doña no era un cuento de hadas.