A juicio por obligar a menores a vender droga en un instituto de Castilla-La Mancha

La Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Albacete tiene previsto juzgar este miércoles, 22 de septiembre, a J.V.J.J., acusado de suministrar marihuana a menores de edad para que la vendieran en un instituto de Hellín.

Según el escrito de acusación, al que ha tenido acceso Europa Press, fue en octubre de 2017 cuando el acusado, J.V.J.J. comenzó a suministrar la droga a uno de los estudiantes, menor de edad, para que la vendiera entre sus compañeros, en un instituto de Hellín.

Este hecho fue desconocido para el profesorado y las autoridades hasta el 13 de marzo de 2018, cuando la jefa de estudios del centro denunció a dicho alumno a la Policía Nacional, personándose los agentes en el centro, sobre las 10.20 horas, para que el menor entregara las sustancias que poseía, en concreto, un cogollo de marihuana que llevaba envuelto en papel de aluminio y escondido en la ropa interior.

Tras lo sucedido, esa misma mañana, el procesado volvió a suministrar marihuana a otro estudiante, también menor de edad, para que la vendiera a un precio de 10 euros el cogollo, llegando a amenazarle con darle una paliza mientras le mostraba una navaja.

Registro

Finalmente, los agentes realizaron un registro en la vivienda de J.V.J.J. en la que encontraron un extractor de polen con 14 gramos de cannabis, varias cajas con un total de 30 gramos de marihuana, dos envoltorios con 9,6 gramos de marihuana y 200 euros en efectivo. Asimismo, durante la detención, se le intervino al acusado 44,88 gramos de cannabis y 5,28 gramos de resina de cannabis.

Unos hechos que la Fiscalía considera que son constitutivos de un delito contra la salud pública por el que piden cinco años de prisión y el pago de una multa de 1.000 euros. Además, el Ministerio Fiscal solicita la pena de un año de prisión por el delito de amenazas.

De manera alternativa, la Fiscalía pide cuatro años de prisión por el delito contra la salud pública y una multa de 750 euros, así como la pena de un año de prisión y la prohibición de aproximarse a A. a menos de 500 metros durante dos años, por el delito de amenazas.