Las Chorreras del Cabriel, en la provincia de Cuenca, se confirman como el paraje natural más conflictivo de Castilla-La Mancha. Allí, solo en las últimas dos semanas, se han producido siete accidentes con heridos, protagonizados habitualmente por senderistas y bañistas que no cumplen las normas. Los dos últimos se registraron este domingo. 

Las dos últimas víctimas han sido una mujer de 40 años y un joven de 21, que sufrieron sendas caídas durante la jornada. Ambos tuvieron que ser trasladados al hospital Virgen de la Luz de Cuenca, donde la mujer llegó después de ser rescatada con dificultad por los servicios de emergencias.  

Fuentes del 112 de Castilla-La Mancha han informado de que el suceso se produjo a las 14.21 horas y que la intervención tardó en solventarse al encontrarse la herida en un lugar de difícil acceso en el término municipal de Enguídanos (Cuenca).

Los bomberos de Motilla del Palancar portearon a la herida en camilla hasta la ambulancia de soporte vital básico, que luego la trasladó al Hospital Virgen de la Luz de Cuenca. Además, se desplazó la Guardia Civil.

El hombre de 21 años, también en Enguídanos (Cuenca), sufrió el percance a las 18.05 horas de este domingo. Se trata de la séptima persona que sufre un accidente en este paraje en dos semanas.

El pasado domingo 24 de julio resultaba herido un joven de 19 años. La misma semana, el martes 19, sufría un accidente una mujer de 20 años, que se precipitaba desde una altura de 10 metros en la zona. Posteriormente, el miércoles 20, una mujer de 38 años de edad resultaba herida tras sufrir una caída en la zona de baño de las Chorreras y, asimismo, el sábado 23 otros dos hombres también resultaban heridos tras caerse cuando intentaban acceder a una de las chorreras.

Imprudencias

El alcalde de Víllora (Cuenca), José Ramón Ubiedo, advirtió recientemente de los altos costes que supone movilizar operativos de rescate en las Chorreras del río Cabriel, asegurando que casi la totalidad de los incidentes se producen por "imprudencias".

Por ello, ha reclamado a los usuarios y visitantes de este paraje natural del río Cabriel "prudencia y precaución", al tiempo que ha exigido que se cumplan las normas.

En 2020, el Gobierno regional ya acordó con los Ayuntamientos de Víllora y de Enguídanos regular el aforo a las Chorreras del Cabriel y reforzar las actuaciones de vigilancia, y ahora se estudia aumentar esas restricciones.

Este paraje natural forma parte de la Reserva de la Biosfera del Valle del Cabriel, declarada por la Unesco en 2019, y tiene unas normas que deben cumplir todos los visitantes, como la obligatoriedad de reservar plazas de aparcamiento en las zonas habilitadas para ello en Enguídanos o Víllora, puesto que está prohibido hacerlo fuera de ellas.

Además, los visitantes deben de circular por los senderos y bañarse únicamente en las pozas señalizadas, ya que está prohibido pisar las cascadas y las zonas donde está fluyendo el agua, según recoge el decálogo de normas al visitante de las Chorreras del Cabriel.