Operación Rosbunk

Sucesos

Cae una red que estafaba desde Guadalajara aprovechándose de padres angustiados

Simulaban que su hijo estaba en apuros para convencerles de que realizaran transferencias bancarias.

21 diciembre, 2023 12:15

Una operación conjunta de la Guardia Civil y la Ertzainza ha culminado con la desarticulación de una organización criminal que se dedicaba a estafar a centenares de personas simulando que sus hijos se encontraba en apuros. Esta banda tenía en Guadalajara uno de sus centros neurálgicos y estaba compuesta por seis personas que han sido detenidas y cuatro más que están siendo investigados. 

En dos registros realizados por las autoridades en las provincias de Madrid y Guadalajara, han encontrado 350 módulos de telefonía, 800 tarjetas SIM, cinco dispositivos inalámbricos de telecomunicaicón, cinco ordenadores y siete discos duros. Con este sistema, los investigadores estiman que podían realizar envíos masivos de hasta 8.000 mensajes diarios, según ha informado la Guardia Civil. 

La operación 'Rosbunk' arrancó a partir de una denuncia presentada en una localidad de Ávila. En ella, la víctima aseguraba haber sido víctima de una estafa de 11.000 euros por este método.

El modus operandi de la banda consistía en mandar mensajes de texto a números desconocidos en los que alguien que decía ser el hijo del receptor aseguraba haberse quedado sin móvil y necesitar de manera urgente dinero para volver a casa. A través del número desde donde recibía el mensaje, el estafador lograba convencer a la víctima para que realizase transferencias bancarias.

En el caso concreto de Ávila, la víctima transfirió un total de 11.000 euros a través de tres cuentas distintas y envíos de dinero por un sistema de pagos rápidos e instantáneos.

Los agentes de la Guardia Civil analizaron la información y consiguieron identificar a los titulares de las cuentas bancarias beneficiarias de ese dinero, ubicados en las provincias de Valencia, Córdoba, Barcelona y Huesca.

Continuando con los datos obtenidos se consiguieron dos posibles ubicaciones desde donde se podrían estar enviando masivamente los mensajes de texto. Dos domicilios, uno de ellos en Guadalajara y otro en Madrid, con un hombre como sospechoso.

Mientras seguía la investigación, los agentes comprobaron que la Policía Autonómica Vasca, la Ertzaintza, también estaba investigando a la misma persona dentro de su operación denominada 'Pool' por al menos 20 estafas con casi 50.000 euros defraudados.

La Guardia Civil y la Ertzaintza unificaron la investigación para desarticular la red criminal. Como resultado, este mes de diciembre se han realizado dos entradas y registros domiciliarios de forma simultánea en los inmuebles citados, donde además de incautar 350 módulos de telefonía, 800 tarjetas SIM de distintas operadoras, cinco dispositivos inalámbricos de telecomunicación, cinco ordenadores y siete discos duros; recuperaban 45.000 euros del dinero defraudado. A ello se suma el bloqueo de cinco cuentas bancarias con más de 100.000 euros.

En total, han sido detenidas seis personas e investigadas otras cuatro a las que se les imputan los delitos de estafa, blanqueo de capitales y usurpación de estado civil.

Una vez que las víctimas caían en el engaño, realizaban las transferencias a terceras personas, denominadas mulas, que dificultaban el rastreo de dinero.

Las mulas se quedaban con una pequeña cantidad ya pactada y el montante restante se lo entregaban a los líderes, que invertían parte de lo estafado en criptomonedas, con el fin de eludir el control bancario.

Los investigadores continúan analizando todo el material intervenido para poder identificar y ayudar al número total de víctimas estafadas.