Los servicios funerarios sacan de la vivienda a uno de los fallecidos.

Los servicios funerarios sacan de la vivienda a uno de los fallecidos. Javier Longobardo

Sucesos

Los cuatro fallecidos en una vivienda de Toledo murieron de la misma forma, según las autopsias

El análisis forense de los cuerpos confirma una intoxicación "muy alta" por monóxido de carbono.

22 marzo, 2024 13:38

Las autopsias ya realizadas a los cuerpos de los cuatro fallecidos en el interior de una vivienda del Casco Histórico de Toledo, que fueron hallados el pasado martes por la noche, apuntan a que todas las víctimas perdieron la vida por un mismo motivo: una intoxicación "muy alta" por monóxido de carbono.

Así lo ha asegurado este viernes la delegada del Gobierno en Castilla-La Mancha, Milagros Tolón, que ha puntualizado que las primeras conclusiones del análisis forense tendrán que ser confirmadas en las próximas horas por el Instituto Nacional de Toxicología. Los cadáveres no presentan signos de violencia.

En una de las estancias del inmueble fue encontrada una estufa de butano encendida, aunque todo el gas ya se había consumido cuando los servicios de emergencias accedieron al domicilio alertados por conocidos de uno de los fallecidos, que no lograba contactar con él desde cuatro días antes.

¿Vivienda subarrendada?

Tolón ha informado también de que ya se ha podido localizar a los familiares de tres de los cuatro fallecidos, que fueron una mujer de 46 años y tres hombres de 56, 58 y 64 años. Uno de ellos era rumano y otro, aunque con nacionalidad española, había nacido en Reino Unido.

Estas cuatro personas vivían en un piso ubicado en el número 12 la calle Cuesta de Santa Leocadia que, presuntamente, había sido subarrendado por habitaciones. Los investigadores hallaron candados en cada una de las puertas de las distintas estancias. Dos de los hombres fueron encontrados muertos en sendas habitaciones y en una tercera estaban los del otro hombre y la mujer, que según los vecinos eran pareja. 

El periódico local La Tribuna de Toledo ha publicado este viernes que el propietario de la vivienda la tenía alquilada desde hacía cuatro años a una mujer y que ha presentado una denuncia por daños y perjuicios a su inquilina, asegurando que desconocía que ahora vivieran allí otras personas.

El propietario ha contado también que la arrendataria niega que haya realquilado el piso por habitaciones, defendiendo que los fallecidos eran unos amigos de su hijo que estaban residiendo allí de manera temporal.

Desde la Delegación del Gobierno en Castilla-La Mancha no se ha confirmado la existencia de esta denuncia ya que "no hay información al respecto" y, en todo caso, sería una "cuestión entre particulares".