Enoturismo y cuevas, dos opciones para hacer turismo en Tomelloso
La ciudad cuenta con multitud de actividades y oferta en lo que a turismo se refiere para los miles de visitantes que la eligen como destino.
El turismo de Tomelloso viene creciendo exponencialmente en los últimos años debido, en gran parte, a que los numerosos atractivos con los que cuenta la localidad entre su patrimonio ayudan y mucho a que viajeros de diferentes puntos del mapa decidan llegar hasta Tomelloso para conocer todos sus encantos.
Tomelloso es una de esas ciudades enclavadas en el corazón de La Mancha que sorprende a todo el que se anima a visitarla. Su tradición vitivinícola, sus pintorescos museos y el gran patrimonio cultural con el que cuenta gracias a ser cuna de grandes escritores y artistas hacen de esta localidad un auténtico atractivo para turistas que buscan escapar de lo rutinario y enamorarse de tierras manchegas como estas.
Enoturismo: conocer el mundo del vino de primera mano
Uno de estos grandes atractivos turísticos de la ciudad es el enoturismo. Éste da nombre al turismo del vino y tiene el propósito de visitar viñedos y bodegas, realizar catas y comprar vinos elaborados en la zona. Todo esto define a la perfección a Tomelloso, ya que se trata de un pueblo con multitud de viñedos y que cuenta con hasta siete bodegas diferentes en las que los turistas pueden adentrarse de lleno en este mundo y conocer de primera mano todo lo relacionado con el vino.
Bodegas Centro Españolas, Bodegas y Viñedos Verum, Casaquemada Vinos y Viñedos, SAT 3756 San José, Vinícola de Tomelloso, Viña Ruda y Virgen de las Viñas Bodega y Almazara son las siete que actualmente se encuentran en Tomelloso y que los apasionados del vino y los viñedos pueden conocer. A éstas hay que añadirles las destilerías Peinado, Osborne y Fundador, que también se encuentran en la ciudad.
Además de todo esto, el Ayuntamiento de Tomelloso quiere dar aún más cabida al enoturismo y cada mes de noviembre organiza el programa “Raíces y Vino”, que se enmarca en la celebración del Día Mundial del Enoturismo celebrado cada segundo domingo de noviembre. Esta actividad invita a vecinos y visitantes a participar en jornadas directamente relacionadas con el vino y que se extienden durante un mes. La labor y el esfuerzo que realizan también tanto bodegas como propietarios de cuevas son punto muy importante para que el enoturismo esté en boga hoy en día en la ciudad.
Hay que destacar también la celebración de “Brindemos”, que recientemente celebraba su primera edición con el objetivo de presentar los vinos jóvenes de la nueva añada de las bodegas de Tomelloso. El evento, que llega para poner en valor el trabajo de bodegas y viticultores y ensalzar el enoturismo, fue todo un éxito en su estreno con la totalidad de las plazas ocupadas y llega para quedarse y consolidarse.
Cuevas de Tomelloso: uno de los mayores patrimonios de la ciudad
Si hablamos del turismo en Tomelloso es obligado hablar también de sus famosas cuevas, definidas por algunos como el mayor patrimonio de la ciudad. El origen de este patrimonio turístico de la localidad se remonta a 1820 aproximadamente, fecha en la que se empezaron a construir más de 2200 cuevas bajo las casas de los vecinos para almacenar vino.
Las cuevas de Tomelloso reúnen todas las condiciones indispensables para guardar vino en estado de quietud y evitando cambios de temperatura bruscos, lo que ayuda a su perfecta conservación. Su buena arquitectura, a pesar de la antigüedad de muchas de ellas, ha hecho posible que se conserven en condiciones óptimas. Esto permite también que los visitantes que llegan hasta este pueblo conozcan algunas de estas curiosas cavidades, que son dignas de conocer y toda una experiencia para los turistas.
Hoy, Tomelloso cuenta entre su patrimonio con hasta once cuevas que están abiertas al público a través de visitas organizadas para poder conocerlas en primera persona. Las cuevas que son visitables actualmente son la del abuelo Moreno, Perales, Garcilaso, Orígenes, Ceferino, 'Herraura', Caridad Secreta, Cáritas, del abuelo Agustín y la cueva Galileo y cueva Casero, siendo estas dos últimas del año 1845, las más antiguas que se conservan.
Debido al incremento del interés y de las visitas a estas curiosas cavidades de Tomelloso surgió la Asociación Amigos de las Cuevas, que tiene por objetivo dar a conocer y preservar este tesoro ubicado en pleno corazón de La Mancha. Desde la asociación trabajan también en la planificación y organización de las visitas a las cuevas, dado que a ellas se accede desde viviendas privadas de los propios vecinos de la localidad.
Todo el que se anime a visitar las cuevas de Tomelloso vivirá una experiencia única que comienza accediendo a una vivienda privada a través de la que accederán a impresionantes cuevas perfectamente conservadas, algunas de ellas de finales del siglo XIX.
Tanto es el atractivo que tienen estas cuevas en los últimos años que más de mil personas se animaron a visitarlas durante el programa “Raíces y Vino”, organizado por el Ayuntamiento el pasado mes de noviembre.
Una ciudad ideal para hacer turismo en La Mancha
En definitiva, podemos decir que Tomelloso es todo un sinfín de experiencias inolvidables para todo el que se anime a visitar la ciudad. Aquí podrás visitar desde un viñedo hasta acabar en una profunda cueva habiendo pasado antes por cualquiera de sus maravillosas bodegas.
De esta manera, el enoturismo y las cuevas se postulan como dos de los principales activos y atractivos turísticos y patrimoniales de Tomelloso, aunque acompañados de muchas más actividades.