Desde que se disolvieron las Cortes Generales por falta de acuerdo, el Partido Popular respira tranquilo. Sin mover ni un solo dedo en los cuatro meses que duraron las negociaciones infructuosas de la anterior legislatura, los pronósticos que manejan en la sede nacional del PP son bastante alentadores, mejores que los resultados que cosecharon el 20D (28,72%). De hecho, según las fuentes consultadas, los votos que el PP obtendría hoy sería casi el 30% del sufragio total. "En todas las encuestas” aparece Podemos, según los pronósticos de los conservadores.
Si la campaña no se desvirtúa por ningún factor externo, en Génova creen que Mariano Rajoy podrá gobernar con el apoyo de Ciudadanos, que subiría “otro punto” hasta rondar el 15% de los votos. Polarizar la campaña con mensajes de que si no gobierna el PP lo hará Podemos ha servido para “despertar al votante de centroderecha que el 20D se quedó en casa y que quiere evitar a toda costa que gobierne Pablo Iglesias”.
Otro de los factores que han cambiado en las encuestas internas que maneja el PP es qué partido va en segunda posición. Según las mismas fuentes, desde que Podemos anunció su alianza con Izquierda Unida, “el PSOE aparece en tercera posición”, rozando muy de cerca a Unidos Podemos. Si se certifica el 'sorpasso' de la alianza de fuerzas de izquierdas, el PP confía en que Sánchez dimita “esa misma noche” y su nuevo interlocutor, sea Susana Díaz o quien sea, ya no se oponga a que Rajoy siga siendo presidente.
Sánchez: "No habrá terceras elecciones"
El propio Sánchez reconoció este viernes en la reunión anual del Círculo de Empresarios de Economía que “no habrá terceras elecciones” porque habrá acuerdo y nuevo gobierno tras el 26J, sea cual sea el resultado. El secretario general del PSOE ha dado un viraje de 180 grados a su discurso: ya no dice que Mariano Rajoy no volverá a ser presidente.
El discurso que mantenía Ciudadanos también ha sufrido cambios. Pablo Casado, vicesecretario de Comunicación del PP, apuntaba este viernes en una entrevista radiofónica que el partido de Rivera “ya no dice tan frontalmente” si mantiene el veto a Mariano Rajoy. De hecho, desde la formación naranja ha moderado tanto los mensajes desde que el reloj se ha puesto de nuevo en marcha que ahora solo dicen que “Ciudadanos formará parte del cambio”, pero no dicen de qué cambio.
El veto a Rajoy
Aunque la versión oficial del partido de Rivera es que aún no manejan ninguna encuesta interna, son conscientes de que si Podemos sobrepasa al PSOE, en número de votos y escaños, “no quedará más remedio” que gobierne la lista más votada. Pablo Casado apuntaba que “es muy difícil” que se pueda vetar a alguien que ha ganado dos veces consecutivas las elecciones. Además, “mantener esa presión sobre Rajoy” puede plantear “un efecto espejo” sobre quien la plantea. Este es el motivo por el que, a juicio de Casado, en Ciudadanos ya no son tan tajantes al respecto.
En las semanas que faltan hasta la nueva cita electoral, Rajoy va a estirar la gestión económica del Ejecutivo que presidió para contraponer su oferta a la de Podemos. De hecho, esta semana el líder del PP ya ha anunciado que “el radicalismo es una realidad” para ir comparando poco a poco “qué pasará con España si Pablo Iglesias consigue ser presidente del Gobierno”.