Patricia López Silvia P. Cabeza

“Gracias al voto accesible y el braille, el voto para las personas ciegas es secreto”. Para Alberto Daudén este es el aspecto más importante de este sistema de votación. Con discapacidad visual desde los seis años, Alberto se quedó ciego a los veinte. Lleva 26 años trabajando en la ONCE y es el actual Secretario Técnico de la Comisión Braille Española, encargada de las normas de uso y desarrollo del sistema de lectura y escritura táctil creado por el francés Louis Braille en el siglo XIX.

El voto accesible garantiza el derecho a sufragio de manera autónoma y privada a través de un kit especial de votación para las personas ciegas o con discapacidad visual. Esta forma de votación, presente desde hace ocho años, está regulada en el Real Decreto 1612/2007. Gracias a esta normativa, las casi 73.000 personas ciegas o con algún tipo de discapacidad visual que viven en España pueden votar de manera independiente.

¿Cómo votan los ciegos?

Para Daudén, la clave es que con este decreto la persona ciega puede elegir: “Una de las palabras clave es elegir. Elegir si quieres ejercer el voto con ayuda o tú mismo, a través del sistema braille”.

Desde que se implantó la norma en 2007, en los siete comicios electorales celebrados con posterioridad se ha aplicado este método de votación. Según los datos que maneja el Ministerio de Interior, en las pasadas elecciones generales del 20 de diciembre se recibieron un total de 963 solicitudes de voto accesible. Suponen un 24% menos de las peticiones que se recibieron en los comicios generales de 2011. Para Alberto esto se puede deber al momento en que se hacen. “Ese día a lo mejor te apetece ir al campo y vas al campo. Y, además, tienes la cuestión añadida de que tienes que ir solo... Hay muchas cuestiones por las que no se vota, o porque simplemente no te apetece ir ese día”.

P.L.

En muchos casos estas cifras a la baja se pueden deber a lo laborioso de votar mediante el kit accesible. Así lo explica Pedro Pablo Martín, quien perdió la vista a los doce años a causa de una retinopatía. Sólo ha hecho uso del voto accesible en dos ocasiones: “No me compensaba”, reconoce. “Tardamos mucho más que la gente que ve”.

Para este psicólogo jubilado esto supone que a veces ni se lo plantee. A pesar de todo, Pedro Pablo reconoce que aporta la tranquilidad de poder votar a quien tú quieras en secreto o en la intimidad. “Es muy valioso para nosotros”, opina.

La votación accesible para las personas ciegas

La norma que regula el voto accesible establece la “utilización de papeletas y sobres de votación normalizados a los que se acompaña documentación complementaria en sistema Braille”. Alberto rechaza la denominación habitual de ‘voto en braille’. Explica que “no hay que hablar de voto en braille, sino a través del braille. Por ejemplo, con este kit podemos votar de manera normalizada”. Recalca que es importante esta diferencia puesto que el voto es exactamente igual al del resto. El braille solo interviene como ayuda y guía para poder votar como las personas sin discapacidad.

Documentación en braille para la preparación del voto Silvia P. Cabeza

“Antes utilizábamos un tercero, es decir, un familiar, un vecino o no votabas”, comenta. Ayudarse de otra persona para el sufragio supone la pérdida de privacidad para los discapacitados visuales. “Si voy contigo, tú vas a saber en todo momento a quién voto”, apostilla. “Desde el punto de vista de los derechos para las personas con discapacidad es un antes y un después”.

Alberto deja claro que el trato a la hora de votar en el colegio electoral es exquisito y que en todo momento hay gente dispuesta a ayudar, pero “también llevamos ocho años con el voto accesible y no todo el mundo lo conoce”.  El técnico de la ONCE comenta, por ejemplo, que este desconocimiento puede llevar a que te inviten a ponerte en el pasillo para que tú selecciones tu voto. Para poder ejercer el voto como el resto, las personas ciegas necesitan de un espacio amplio donde poder sacar todo el material. “Necesito irme a un sitio y extender mi documentación, y pacífica y tranquilamente hacer lo que usted hace en una cabina”, sentencia al respecto.

La sensación para Pedro Pablo es similar: “Tardaba mucho hasta que me metían en un cuarto”, cuenta en relación a su experiencia con el voto accesible. “Tienes que recorrer un montón de espacio hasta que llegas a un sitio en el que puedas estar solo”.

¿Cómo es el proceso de votación?

El primer paso comienza por la ONCE, quién se encarga de informar a todas sus sedes de las fechas clave y los sitios desde donde solicitar el voto.

Comunicado informativo del voto accesible ONCE

Una vez que las personas con discapacidad visual hayan solicitado su voto, es el Ministerio del Interior quien se encarga de elaborar un contrato para la fabricación de los kits de votación accesibles. Se fabrican tantos kits como solicitudes de voto haya. Cada circunscripción es diferente; por cada una de las 52 se fabrica un ejemplar para la Comisión Braille Española, para testear y certificar que todos los kits de votación accesible estén correctos. “La Comisión Braille Española solo se encarga de la correspondencia de la tinta con el braille”, cuenta su secretario técnico.

Una vez comprobado que todo está correcto, la comisión emite un certificado al Ministerio de Interior de verificación de los kits de muestra. Tras todo este proceso de envío y validación de los maletines, éstos llegan a la mesa electoral (no al domicilio del votante), por lo que el presidente de mesa ha de tener constancia de las personas ciegas que votarán en la misma.

Kit de voto accesible Silvia P. Cabeza

Estos maletines se componen de:

1. Una guía explicativa en braille

2. Un sobre grande con una etiqueta en braille y tinta que dice “Elecciones al Congreso de los Diputados”. Éste contiene un sobre en braille por cada una de las candidaturas que se hayan presentado.

3. Un sobre de votación normalizado, no rotulado en braille, para la introducir la papeleta seleccionada del Congreso de los Diputados.

4. Una plantilla troquelada (por las dos caras), dentro de la cual está la papeleta electoral estándar correspondiente al Senado.

5. Un listado, en braille, con los nombres de los candidatos y candidatas a la Cámara Alta que sirve de guía para la ‘plantilla del Senado’.

6. Un sobre de votación normalizado, no rotulado en braille, para el Senado.

P.L.

Mejoras del sistema de voto accesible

Todo en la vida es susceptible de mejora, y el voto accesible no es una excepción. Según el Informe de evaluación sobre accesibilidad y procesos electorales, elaborado por el Ministerio de Interior y en que se hace balance de la aplicación de la ley, se alude a un proyecto piloto de “papeletas accesibles” en el que la ONCE y el Ministerio de Interior están trabajando desde el año 2010 para mejorar el voto accesible de las personas ciegas. Consiste en la fabricación de papeletas electorales que cuenten con una aplicación informática para cargar, seleccionar e imprimir la papeleta oficial a través del ordenador.

Prueba piloto con 'papeletas accesibles' ONCE

El voto accesible requiere saber utilizar el sistema braille. Desde la perspectiva de Pedro Pablo esto supone un problema: “No todo el mundo sabe braille”. Hay mucha gente mayor que no ha aprendido braille y no se van a manejar en esta situación”, opina.

El envío del kit de voto a domicilio, el voto por correo o el voto electrónico son algunas de esas mejoras posibles que las personas ciegas han manifestado y que pueden solventar situaciones como la anterior. Alberto opina que la existencia del voto accesible es un gran avance, pero como todo “es cuestión de ir mejorando las cosas poco a poco”.

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