Para la juventud, las cuestiones del desempleo, el subempleo y la mala calidad del empleo han demostrado ser persistentes y desalentadoras en todo el mundo. Los desafíos de asegurar y conservar un trabajo decente son aún más serios y complejos para los grupos más vulnerables, como mujeres jóvenes, quienes viven en zonas que precisan de asistencia humanitaria, con discapacidades, migrantes o personas LGTBI+.
En Ayuda en Acción entendemos que, para luchar frente a la desigualdad, todas las personas deben tener el derecho de acceder a las mismas oportunidades. Para lograrlo, contribuyendo al ODS 8, promovemos la inclusión socioeconómica, con el foco puesto especialmente en la juventud, con la búsqueda de oportunidades en el mundo laboral y del emprendimiento.
En este sentido, trabajamos promoviendo sistemas de mercados inclusivos que favorezca una dinámica económica que facilite la integración de la juventud al mercado laboral y al emprendimiento. Nuestro enfoque aborda las causas estructurales por las que los mercados generan dinámicas que excluyen a las personas pobres y no satisfacen sus necesidades. Se centra en intervenciones que modifican los incentivos y el comportamiento de las empresas y otros agentes del mercado para garantizar cambios a gran escala, sostenibles e inclusivos.