Los impactos del cambio climático están aumentando en magnitud en todo el mundo. Su carga global ya abarca muertes, enfermedades, la pérdida de medios de vida, daños a la propiedad e infraestructura, otras pérdidas económicas y la de la biodiversidad.
Por si esto fuera poco, la Amazonía, el principal pulmón verde del planeta, está en declive.
Según el informe de Oxford Institute Global Climate Change Impacts Attributable to Deforestation of the Brazilian part of the Amazon Rainforest driven by the Bolsonaro Administration, hay una evidencia científica de que en la Amazonía brasileña ha aumentado sustancialmente la deforestación durante el Gobierno de Jair Bolsonaro.
Hay evidencia científica de que en la Amazonía brasileña ha aumentado sustancialmente la deforestación durante el Gobierno de Jair Bolsonaro
Se estima que las emisiones atribuibles a su gobierno, sobre la base de los compromisos climáticos actuales, causarán en todo el mundo más de 180.000 muertes relacionadas con el calor durante los próximos 80 años.
"Antes de la elección de Bolsonaro, la deforestación en la Amazonía brasileña había caído sustancialmente desde su pico a principios de la década de los 2000 y luego se estabilizó durante la década de 2009-2018", asegura el informe.
Sin embargo, el rápido aumento de esta desde 2019 "ha resultado en un aumento importante en las emisiones de gases de efecto invernadero de la Amazonía brasileña, que tendrá consecuencias humanitarias globales", añade.
Tanto es así que las emisiones anuales atribuibles a la Administración de Bolsonaro por sí solas equivalen a aproximadamente el 1% de las emisiones globales, similar a las emisiones totales del Reino Unido.
Según datos del Instituto Nacional Brasileño de Investigaciones Espaciales (INPE), en 2019, las tasas de deforestación fueron un 34% superiores a las de 2018, y las más altas en más de una década.
La deforestación se aceleró aún más en 2020, hasta un 44% por encima de los niveles de 2018.
Denuncia en la Corte Penal Internacional
Con este informe bajo el brazo, la organización AllRise acaba de acusar al presidente brasileño de crímenes contra la humanidad en un caso legal presentado ante la Corte Penal Internacional de La Haya.
Junto a la oenegé se han unido referentes científicos, jurídicos y líderes ambientales. Entre ellos, Sir Howard Morrison, juez de la Corte Penal Internacional de 2011 a 2021, y la Dra. Friederike Otto, climatóloga y autora principal del último informe del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC).
Las emisiones atribuibles al Gobierno de Bolsonaro causarán más de 180.000 muertes en los próximos 80 años
Con la iniciativa El planeta contra Bolsonaro, AllRise busca impulsar una causa que argumente que las acciones de Bolsonaro y su administración son un ataque generalizado contra la Amazonía, sus habitantes y sus defensores. Y que no sólo tienen como consecuencia la persecución, el asesinato y el sufrimiento humano en la región, sino también para toda la población mundial.
"Al ser el pulmón de nuestro planeta, la destrucción del bioma del Amazonas nos afecta a todos. En nuestra denuncia presentamos pruebas que muestran cómo las acciones de Bolsonaro están directamente conectadas con los impactos negativos del cambio climático en todo el mundo", explica el fundador de AllRise, Johannes Wesemann.
"Los crímenes contra la naturaleza son crímenes contra la humanidad. Jair Bolsonaro está promoviendo la destrucción masiva de la Amazonia con los ojos bien abiertos y con pleno conocimiento de las consecuencias", sentencia.
Los bosques y el CO₂
La deforestación en partes del bioma amazónico ya libera más CO₂ del que absorbe el resto de la Amazonia. Este aumento del dióxido de carbono en nuestra atmósfera es una de las razones del aumento de las temperaturas y de la crisis climática mundial, con graves repercusiones para la salud humana.
La Dra. Friederike Otto, profesora titular del Instituto Grantham de Cambio Climático y Medio Ambiente del Imperial College de Londres y coautora de la comunicación ante la Corte Penal, explica que "a medida que el clima cambia, las olas de calor en todo el mundo aumentan en número, intensidad y duración".
Y añade: "Las olas de calor son, con diferencia, los fenómenos extremos más mortíferos en muchos países. El 37% de las muertes relacionadas con el calor en las últimas tres décadas se atribuyen al cambio climático en todo el mundo, lo que equivale a miles de muertes al año".
Al ser el pulmón de nuestro planeta, la destrucción del bioma del Amazonas nos afecta a todos
Nigel Povoas Q.C., Queen's Counsel y responsable del enjuiciamiento de algunos de los más notorios criminales internacionales en los últimos 15 años, añadie que "la Corte Penal Internacional se basa en el Estatuto de Roma, lo que ofrece un marco legal para procesar a los autores de crímenes internacionales de alto nivel como Bolsonaro".
"Al abrir una investigación con vistas a su enjuiciamiento, sentaría un importante precedente en el enjuiciamiento de los principales delitos contra el medio ambiente", explica.
La deforestación y los incendios forestales en el Amazonas han alcanzado niveles récord. Se ha producido la desaparición unos 4.000 km² de bosques al año durante la Administración de Bolsonaro.
Durante su presidencia las tasas de deforestación mensuales se han acelerado hasta en un 88%. Si esto continúa, las consecuencias serán muy graves.
Si se continúa sin poner solución, se está empujando a la Amazonía hacia un punto de inflexión más allá del cual el bosque pasaría a ser un ecosistema seco.
Las olas de calor y los incendios forestales, como los experimentados recientemente en Brasil, el sur de Europa, el noroeste del Pacífico norteamericano y Australia, así como las inundaciones y otros fenómenos meteorológicos extremos sufridos recientemente en Alemania, Estados Unidos y China, se verán intensificados por la deforestación de la Amazonia.