Ahorrar en el consumo de electricidad en casa tiene numerosos beneficios, entre ellos, ayudar en la lucha contra el cambio climático, ya que seguimos dependiendo en una buena parte de los combustibles fósiles que generan gases de efecto invernadero. Pero no solo eso, sino que también benefician a nuestro bolsillo. El año pasado, un hogar medio español pagó 1.538,53 euros por la factura de la luz, un 37,9% más que el año anterior, marcando un absoluto récord.
Así, con unos pequeños y simples cambios podremos utilizar la energía de una forma más inteligente y lograremos consumir menos energía, logrando así reducir nuestra factura de la luz y nuestra huella medioambiental.
Para ello, desde la Agencia Internacional de la Energía (AIE), la organización internacional que asesora en esta materia a los 28 miembros de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos —más conocida por sus siglas OCDE—, proponen siete pasos para lograr nuestro objetivo.
1. Bajar la calefacción y subir el aire acondicionado
Según la AIE, bajar la calefacción en tan solo un grado centígrado puede ahorrar alrededor del 7% de la energía que gasta la calefacción. Esta reducción, lógicamente, también repercutiría en la factura de la luz, en la que habría un ahorro de entre 50 y 60 euros al año.
Asimismo, recomienda utilizar termostatos ajustables para mantener la temperatura a 15 ºC mientras se duerme y a 10 ºC cuando la casa está desocupada. Esto reduciría hasta un 10% la factura de la luz.
Cuando se trata del verano, se aplica la misma lógica al aire acondicionado. Aumentar la temperatura general en 1 ºC puede ayudar a reducir la factura hasta en un 10%. También refrescar solo la habitación en la que estés puede ser de gran ayuda.
2. Ajustar la configuración de la caldera
Tal y como explican desde esta organización internacional, los ajustes predeterminados de la caldera suelen ser más altos de lo que uno necesita. Y reducir la temperatura del agua caliente puede ahorrar hasta un 8% de la energía consumida y hasta 100 euros de una factura promedio al año. Asimismo, cambiar los baños por duchas ayuda a gastar menos agua y menos energía para calentar ese agua.
3. Mejorar el aislamiento
Cerrar las ventanas y las puertas, aislar las tuberías y tapar los huecos que rodean las ventanas y chimeneas para mantener el aire caliente (y frío) dentro de la casa es una de las mejores maneras de hacer más eficiente nuestro consumo de energía. Aislar o sellar estos huecos permite un ahorro de hasta 100 euros al año, según la AIE.
4. Cambiar las bombillas
Sustituir las bombillas antiguas por unas nuevas que sean de LED, aumenta considerablemente la eficiencia energética de nuestro hogar. Además, se funden con menos frecuencia —por lo que también ahorraríamos en bombillas—, permitiendo ahorrar cerca de 10 euros por bombilla al año, según la AIE. Asimismo, apagar las luces al salir de la habitación es la forma más sencilla de ahorrar energía.
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5. Desplazarse en bicicleta
Caminar o ir en bicicleta son dos alternativas al coche para los desplazamientos cortos y no solo nos ayuda a ahorrar en combustible, sino también a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y evitar los molestos atascos. Además, nos permiten realizar ejercicio físico, por lo que también repercutirá en nuestra salud.
6. Usar el transporte público
En el caso de que tengamos que realizar una distancia larga, donde sea poco práctico ir andando o en bici, optar por coger el transporte público es la mejor opción para ahorrar en combustible y reducir la contaminación atmosférica. Si el viaje es aún más largo, puedes plantearte coger un tren en vez de el coche.
7. Conducir de forma más eficiente
Pero si tenemos que coger el coche, existen opciones para optimizar al máximo el consumo de combustible de nuestro coche. Conducir con suavidad y a velocidades más bajas, bajar las ventanillas cuando vamos a gran velocidad y asegurarnos de que la presión de los neumáticos es la correcta son algunas de ellas. Por ejemplo, según la AIE, conducir 10 km/h más lento por las autopistas puede recortar la factura cerca de 60 euros al año.