Así son los pueblos más aislados de España: en el interior de una cueva o con solo cuatro habitantes
El éxodo rural y la masificación de las capitales nos deja impresionantes paisajes de lo que ya se conoce como España vaciada.
31 agosto, 2023 02:25España conforma una estampa singular, en la que el clima y el paisaje varían según temporada y región. En contraposición al bullicio y la algarabía de la metrópoli, existen rincones en la que la calma y el sosiego vienen como requisito en la ciudadanía.
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El acceso español a Andorra
Os de Civís es una curiosa población de Lleida con poco más de 80 habitantes que ha quedado totalmente incomunicada de España en más de una ocasión. Esto ha provocado que la única vía de acceso sea a través de otro país, Andorra.
Según cuenta la leyenda, la nacionalidad de este pueblo se decidió cuando un grupo de pastores leridanos y andorranos se enfrentaron por el derecho a pastorear en Os de Civís. Como no se ponían de acuerdo, decidieron enfrentar a sus mejores luchadores y la pelea la ganó finalmente el combatiente español.
Como consecuencia del difícil paso a la ciudad, la población se conforma, irónicamente, de andorranos y de algunos españoles cuyos familiares solían residir en el pueblo.
Bulnes, el corazón de los Picos de Europa
Conocido por ser el último pueblo sin acceso rodado de Asturias, Bulnes cambió su historia en el año 2001, cuando decidió acoger un invento que revolucionó todo: el funicular de Bulnes.
Antes solo se podía llegar al pueblo por un sendero tallado entre rocas de cuatro kilómetros de largo. Esta era la única manera en la que un habitante de Bulnes podía llegar a Poncebos, el pueblo más próximo; un trayecto con el que tardaría alrededor de dos horas.
Gracias al funicular, los residentes de este pueblo en el corazón de los Picos de Europa han reducido el tiempo de su trayecto a solo 7 minutos.
La 'república independiente' de Paradilla de Gordón
Nos trasladamos hasta la provincia de León para visitar Paradilla de Gordón, un pueblo de tan solo cuatro habitantes que llegó a declararse república independiente. Si algo le viene de perlas a esta aldea es su nombre, ya que, antiguamente, era un lugar en el que los viajeros se solían parar para descansar de sus largas travesías por carretera.
En su estampa rural, destaca su bar La Abubilla, su iglesia de estilo románico y la senda del Celorio, basada en un relato del escritor José María Menéndez López, titulado Celorio el de Geras, tú sabes.
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El medieval Bandujo
En 1980 la luz fue encendida y el agua instalada en el pueblo asturiano de Bandujo, que recibió estas comodidades mucho más tarde de lo que lo hicieron sus vecinos. Esta población, ya existente en el Medievo, llegó a ser la más aislada de España, debido a que su acceso estaba restringido a la Senda del Oso, una antigua calzada romana de 50 kilómetros en forma de Y.
Sus edificios, declarados Bien de Interés Cultural en 2010, resaltan en el paisaje, conformado por el verde característico de esta región septentrional.
Cuevas del Agua
Son escasos los ejemplos a nivel mundial en el que el asfalto serpentea dentro de una cueva. Por suerte, uno de ellos se encuentra en España, nuevamente en Asturias. Se trata de La Cuevona de Cuevas del Agua o Cueves, una población a la que se ingresa por una concavidad de 300 metros de recorrido y cuyas bóvedas destacan por su grandiosidad.
El gran número de hórreos que hallamos en el pueblo, así como su envidiable orografía —lamido por el río Sella y al pie de la montaña— lo convierten en un destino único a los ojos de cualquiera.