Los vecinos de la localidad cartagenera de Los Urrutias pueden decir que al Mar Menor se le ha aparecido la Virgen. Bajo un firme sol que, por momentos, se tornaba abrasador, un dúo de artistas italianos han fijado en la mañana de este miércoles una estatua de la madonna dell’acqua lurida, la 'Virgen del agua sucia'.
Esta dupla está formada por el director de documentales Pablo D'Ambrosi, y el arquitecto Federico Soffiato. Los dos italianos han querido aprovechar el Día del Medio Ambiente para expresar una reivindicación muy particular en el Mar Menor, levantando esta figura de la virgen construida por el propio Soffiato. Una estatua inspirada en una Virgen de Rafael que ya se luce dentro de las mismas aguas, a unos 100 metros de la arena.
Pero este acto va mucho más allá de la regeneración del Mar Menor. Soffiato y D'Ambrosi han venido a la Región de Murcia para "denunciar la contaminación que las macrogranjas europeas perpetran sobre el medio ambiente". Para hacerlo, este jueves día 6 presentarán en Cartagena su nuevo documental, 'Food for profit'.
Pregunta: ¿Por qué una virgen?
Pablo D'Ambrosi: La virgen es una figura muy representativa de la cultura occidental. Se suele asociar con una figura protectora y madre. Pero no es que queramos mandar un mensaje religioso, sino de defensa del medio ambiente. Está inspirada en la Madonna del Granduca de Rafael.
La preparación del reivindicativo audiovisual 'Food for profit' le ha llevado a D'Ambrosi la friolera de "cinco años grabando en distintos lugares de Europa donde se produce contaminación". Según explica este artista documental a EL ESPAÑOL, el Mar Menor "fue uno de los lugares elegidos para grabar. Vinimos hace unos dos años, cuando la playa estaba repleta de peces muertos".
D'Ambrosi es un hombre entusiasta y atento. Mientras pone a prueba un dron con el que inmortalizará el momento en el que fijarán la estatua sobre un pedestal, atiende con notable entusiasmo a las preguntas del periodista. "Ahora que volvemos a España para presentar este documental, queremos hacer este regalo a la comunidad".
Son las 11 horas, y mientras el dispositivo volador sobrevuela las playas del Mar Menor, Federico Soffiato empieza a liberar del envoltorio la figura que dentro de unos minutos se alzará rodeada por las aguas de la laguna. Un grupo de vecinos curiosos —pensionistas, en su mayoría—, se acercan para contemplar una escena nada común en Los Urrutias, donde la vida transcurre con tranquilidad y pocas novedades durante casi todo el año.
La Virgen, con el niño Jesús en sus brazos, ya están a la vista de todos, y Soffiato, pese al brillo relampagueante de ilusión que desprende su mirada, se esfuerza por mantenerse impasible. "La Virgen está tapando la nariz del Niño Jesús", explica el arquitecto en inglés. "Esto representa la contaminación del agua sobre la que se van a asentar". Un detalle que varía con respecto a la estatua original de Rafael.
Este artista italiano no pasa por alto ningún detalle: su madonna dell’acqua lurida está hecha con materiales biodegradables. "Esta estatua tendrá una vida de unos cinco o seis meses, y después se disolverá, debido a que está a la intemperie".
P.: ¿Con qué materiales está hecha la figura?
Federico Soffiato: El principal material con el que está construida es el papel. Luego, el pegamento que he utilizado es una mezcla de harina y agua. Este, cuando se deshaga y acabe en el mar, incluso podrá servir de alimento para los peces. Me llevó un par de semanas construirla, es la primera que realizo una obra de este tipo.
El arquitecto está a punto de tomar en brazos su estatua de la Virgen para llevarla mar adentro, hasta el altar, donde se exhibirá como reivindicación de la lucha por el medio ambiente. Pero antes, D'Ambrosi aprovecha para recordar el objetivo del documental que presentarán el jueves: "Queremos denunciar el golpe al medio ambiente que llevan a cabo las macrogranjas, a pesar de lo cual siguen recibiendo subsidios de la UE".
"El objetivo es proponer con el lenguaje del arte una discusión sobre el estado de salud del agua, desde un punto de vista no solo medioambiental, sino también social y científico". Ese es el verdadero papel de la 'Virgen del agua sucia'.
Soffiato ya tiene la estatua en brazos, y se encamina hacia el mar con los pies desnudos. Para cuando llega al altar que habían preparado, el agua ya le acaricia las rodillas. Con un taladro de mano fija la figura sobre su nueva base, desde la cual contemplará todos los días las costas de Los Urrutias, y los vecinos a ella. La labor del arquitecto, por el momento, ha culminado, y varios miembros de asociaciones por la defensa del Mar Menor aprovechan para desplegar sus pancartas.
P.: ¿Cuál es su siguiente objetivo para seguir reivindicando la lucha por el medio ambiente?
P.D.A: Este día 6 presentamos el documental 'Food for profit' ante los medios, y el 7 ya podrá verlo todo el mundo en cines de España. Por otro lado, esta madonna dell’acqua lurida que acabamos de poner en Los Urrutias no es una estatua única. Vamos a poner más copias en distintos lugares del mundo para seguir alzando la voz. El próximo lugar será Berlín, colocaremos una en el centro de un río, bajo un puente. Y después, queremos seguir haciendo lo propio en más lugares.