El país que está a punto de desaparecer por la subida del agua: es el menos visitado del mundo
Este paraíso se hunde, literalmente, debido a la subida del nivel del mar, poniendo en peligro la continuidad del país.
16 septiembre, 2024 15:39No es un secreto que nuestro planeta atraviesa una de las peores crisis medioambientales de su historia. Aunque es urgente tomar medidas, hay lugares donde la situación requiere una acción inmediata. Un ejemplo claro es Tuvalu, una isla de la Polinesia que se está viendo amenazada por el aumento del nivel del mar.
Tuvalu, el cuarto país más pequeño del mundo, es uno de los destinos más aislados y menos frecuentados del planeta. A pesar de que pocos conocen este rincón tropical, su importancia no solo se debe a sus playas de arena blanca y aguas cristalinas, sino también a los graves peligros que enfrenta por el cambio climático.
Ubicado en el océano Pacífico, entre Hawái y Australia, este archipiélago de atolones y arrecifes de coral está lidiando con el constante aumento del nivel del mar, lo que podría provocar su desaparición completa en las próximas décadas.
El país menos visitado
Con una extensión de solo 25 kilómetros cuadrados y una población de alrededor de 12.000 personas, Tuvalu es un país que parece haberse quedado al margen del turismo masivo. De hecho, solo recibe cerca de 2.000 visitantes al año, convirtiéndolo en el país menos visitado del mundo.
Sin embargo, esta aparente desconexión del turismo internacional no es por falta de belleza natural. Sus playas, rodeadas de arrecifes de coral, son el hogar de especies marinas únicas, lo que lo convierte en un paraíso para los amantes de la naturaleza y la biodiversidad.
A pesar de ser un verdadero paraíso natural, el acceso a Tuvalu es difícil. Solo hay una aerolínea, Fiji Airways, que ofrece vuelos regulares a la isla, y estos son limitados, lo que hace que el viaje sea costoso y complicado.
Además, la infraestructura turística es prácticamente inexistente, lo que refuerza la imagen de Tuvalu como un destino reservado para los viajeros más aventureros.
Una desaparición inminente
Que Tuvalu sea un paraíso tropical no le exime de que esté en grave peligro. El aumento del nivel del mar, provocado por el calentamiento global, amenaza con engullir completamente este pequeño país insular.
Según estudios recientes, el nivel del mar está subiendo de manera acelerada en el Pacífico Sur, y Tuvalu, con una altura máxima de solo 4,5 metros sobre el nivel del mar, es uno de los países más vulnerables del mundo.
El impacto del cambio climático ya es evidente. Dos de las islas de Tuvalu han sido tragadas por el océano, y el resto de las islas corren el mismo riesgo. Además, los tifones y tormentas frecuentes están erosionando las playas y salinizando las tierras de cultivo, lo que está afectando la agricultura local y la capacidad de los habitantes para subsistir.
Esfuerzo internacional por salvar Tuvalu
En respuesta a esta crisis, Tuvalu ha solicitado ayuda internacional. Durante la COP26, el ministro de exteriores de Tuvalu, Simon Kofe, emitió un emotivo mensaje desde una plataforma sumergida, simbolizando la lucha de su país contra la subida del nivel del mar.
El mundo ha tomado nota, y en 2024, Australia firmó un tratado histórico con Tuvalu, comprometiéndose a proporcionar refugio a sus ciudadanos en caso de un "desastre natural importante".
Este acuerdo permitirá a los tuvaluanos migrar a Australia, preservando su estatus de nación independiente, incluso si su territorio desaparece bajo las olas.
Identidad cultural en peligro
La desaparición de Tuvalu no solo sería una pérdida geográfica, sino también cultural. La identidad de los tuvaluanos está profundamente arraigada en su tierra, en sus costumbres y en su idioma, que podría desaparecer si su población se dispersa por otros países.
Las lenguas indígenas y los conocimientos tradicionales corren el riesgo de extinguirse a medida que los jóvenes adoptarían otros idiomas, como el inglés o el francés, en su migración.
Además, muchas de las palabras y tradiciones culturales de Tuvalu están vinculadas a su entorno natural. Si las especies locales desaparecen y los paisajes cambiarán, gran parte de su patrimonio cultural se perderá.
En un esfuerzo por preservar su identidad, el gobierno de Tuvalu ha comenzado a digitalizar el país en el metaverso, con la esperanza de que las futuras generaciones puedan explorar virtualmente sus paisajes y mantener viva su cultura.