Este mediodía se celebraba la VI edición de los Premios AEF en el Foro de Fundaciones y sociedad civil #Demos2021. Esta gala de premios reivindicó la importancia de la filantropía y el impacto de las fundaciones que impulsan “los valores para resolver los problemas y las necesidades de los ciudadanos y ciudadanas”.
El evento contó con las intervenciones de dos referentes en el sector social: Javier Nadal, presidente de la Asociación Española de Fundaciones (AEF) y el abogado Antonio Garrigues Walker, que presidió el jurado encargado de evaluar a los candidatos y seleccionar a los galardonados.
Este año, el criterio para la concesión de los galardones, distribuidos en cuatro categorías –Iniciativa Filantrópica, Colaboración, Innovación Social y Comunicación– giró en torno a la innovación de los enfoques y proyectos que da respuesta a las necesidades actuales de la ciudadanía.
En el acto, Nadal hizo un llamamiento a la “resignificación de la filantropía” como sinónimo de la solidaridad. “Hay quien piensa que la filantropía es dar dinero que me sobra, por ejemplo, y la solidaridad es otra cosa. Su fuente, su virtud, es la filantropía. No es dar dinero. Es el amor a la humanidad”, señaló el presidente de la AEF.
En su intervención, también destacó la importancia de otros valores que no se suelen reconocer: la colaboración y la innovación social. También puso en valor la comunicación. “Tenemos que encontrar aliados en el mundo social o no que nos ayuden a comunicar”.
"La fuente y la virtud de la solidaridad es la filantropía", aseguró Javier Nadal
Por su parte, Garrigues Walker recordó lo importante que es apoyar mediante este tipo de actos el compromiso y el trabajo de personas y entidades de este ámbito. “A veces, dar simplemente una palmada en la espalda vale más que otras cosas que se pueden hacer. El estar dispuesto a ayudar a los demás debería ser el mayor beneficio que tiene la humanidad”, señaló.
El primer galardonado, en la categoría de Filantropía, fue Diego Hidalgo Schnur. El jurado reconoció su larga trayectoria filantrópica, que permitió la creación y el mantenimiento de más de cuarenta fundaciones e instituciones de diverso tipo, entre las que se incluyen la Fundación para las Relaciones Internacionales y el Diálogo Exterior (FRIDE), el Consejo Europeo de Relaciones Exteriores (ECFR), la Fundación Conferencia Anual Francisco Fernández Ordóñez (CAFFO), o su más reciente iniciativa, la Fundación Maimona, dedicada a promover el desarrollo local en los Santos de Maimona, Extremadura.
El Premio a la Colaboración fue otorgado a la Fundación Ayuda en Acción, por el proyecto Escuelas Digitales Resilientes. La encargada de recibirlo fue María Marañón, directora de Relaciones Institucionales de la entidad.
Este proyecto, que contó con la colaboración del CAF –Banco de Desarrollo de América Latina– y Deloitte tiene como objetivo combatir la brecha digital en los centros educativos, cuyo impacto se ha notado durante la pandemia. Se ha intervenido en 13 centros educativos públicos de cuatro comunidades autónomas –Extremadura, Andalucía, Baleares y Aragón–, y se han beneficiado 355 profesores y 3.176 estudiantes.
"El estar dispuesto a ayudar a los demás debería ser el mayor beneficio que tiene la humanidad”, señaló Garrigues Walker
Escuelas Digitales Resilientes nació como un proyecto cimentado en tres pilares: dotar de equipamiento a niños y niñas que estaban en riesgo de exclusión social de quinto y sexto de primaria, capacitar al profesorado en el uso y manejo de plataformas tecnológicas digitales, y diseñar acompañar y llevar a cabo una serie de planes de transformación digital sostenibles en el tiempo para estos centro escolares.
El proyecto ha asentado un modelo que se podría aplicar directamente en América Latina.
El tercer premio, a la Innovación Social, ha recaído en la Fundación Confederación Estatal De Personas Sordas (CNSE) por su proyecto SVIsual, que ha permitido hacer accesible la comunicación en tiempo real de personas sordas con oyentes. Concepción María Díaz Robledo, presidenta de la CNSE y de la Fundación CNSE para la Supresión de las Barreras de Comunicación, fue la encargada de recoger el galardón.
SVIsual garantiza que cualquier persona sorda, con independencia de que utilice la lengua oral, la lengua escrita, la lectura labial, pueda acceder a los servicios o gestiones que se atiendan a través de llamadas telefónicas, como pueden ser las gestiones de la vida diaria, de emergencia, con Hacienda o con las fuerzas de seguridad del Estado.
Por último, se concedió el premio a la Comunicación, recogido por su directora, Lucila Rodríguez-Alarcón, a la Fundación porCausa. Con su labor, esta fundación ha elevado la calidad del debate público en asuntos relacionados con la pobreza, la inequidad y las migraciones, combinando las capacidades de investigadores sociales, periodistas y narradoras.
La Fundación porCausa promueve la información sobre el desarrollo social, la desigualdad, la exclusión y la sostenibilidad para crear nuevas narrativas que fortalezcan el debate público y generen cambios dentro de nuestra sociedad a través de talleres, conferencias y la formación de formadores para promover el cambio en sus entornos.