Es el momento de debatir qué hacemos con nuestros residuos, un problema poco sexy para hablar sobre ello y al que, muchas veces, le damos la espalda. Estos días ha finalizado la Semana Europea de la Prevención de Residuos (EWWR) con un dato poco alentador: España está a la cola de los países europeos en el tratamiento de la basura. Y no solo en los hogares, en los espacios naturales también es un problema.
Según el Instituto Nacional de Estadística (INE), en España cada individuo genera 442 kilos de residuos, un 9% menos que la media europea. En cambio, en términos de recuperación e incineración, la presencia de residuos en vertederos es un 53% mayor que el resto de países europeos, ya que solo se recuperan en torno a 60 kilos per cápita, mientras que la media europea se sitúa en 133 kilos.
Y también es un problema la basura tirada en la naturaleza. Solo en 2020, el proyecto LIBERA, impulsado por SEO/BirdLife en alianza con Ecoembes en contra de la basuraleza, recogió 13,4 toneladas a pesar de la pandemia. Consiguió identificar cerca de 100.000 objetos abandonados en 611 entornos naturales de España gracias a 12.500 voluntarios.
La presencia de residuos en vertederos españoles es un 53% mayor que el resto de países europeos
Hace unos días, un ayuntamiento de la sierra madrileña, El Boalo, organizó una acción para limpiar de residuos su entorno natural, implicando a todos los vecinos. Pese a que se había incentivado a los jóvenes de la zona con recompensas, fueron las familias con hijos pequeños quienes acudieron a limpiar los objetos tirados y abandonados que no deberían estar allí.
“Cada residuo que acaba en los ríos, en los prados o en los entornos naturales empobrece nuestros pueblos. Nos empobrece a todos. No podemos permitir que esto siga ocurriendo”, decían desde el consistorio.
Gestión de los residuos
Uno de los grandes retos ambientales de los próximos años es la gestión de los residuos, y las 3R (reducir, reutilizar, reciclar) se han convertido en referentes de la sostenibilidad y la economía circular.
En la Semana Europea de la Prevención de Residuos (EWWR) se ha animado a todos los europeos a llevar a cabo acciones de concienciación sobre la gestión sostenible de los recursos y los residuos. Pero en España queda mucho por hacer.
Aunque los ciudadanos van concienciándose lentamente sobre la urgente necesidad de aumentar el reciclaje de la basura que generan, nuestro país sólo recupera el 34% del total de los residuos que produce, casi quince puntos menos que la media europea (46%) y lejos de los objetivos marcados por la Comisión Europea, que ha fijado que se recicle el 55% en 2025 y el 65% en 2035.
Nuestro país sólo recupera el 34% del total de los residuos que produce
El impulso de la economía circular en la búsqueda de una sociedad de cero emisiones requerirá un cambio en los patrones de consumo y producción que van mucho más allá de la acción climática y depende de que transformemos nuestra forma de vivir.
Mayor conciencia
Pero no todo está perdido. En los últimos años, la mayoría de hogares españoles ha incorporado hábitos para ser más sostenibles y la reducción de basuras se encuentra entre las acciones más sencillas y más practicadas, según un informe realizado por la plataforma online de compra y venta de productos de segunda mano Wallapop e Ipsos.
De hecho, el 57% de los españoles intenta reducir sus residuos habitualmente: un 28% lo hace más que antes de la pandemia y un 36% prevé hacerlo más en el futuro. Por generaciones, la generación milenial son los más preocupados por reducir sus residuos (57%), seguidos de la Z (53%).
Incluso hasta un 73% de españoles reconocen que somos los principales responsables de la sostenibilidad y, por tanto, parte protagonista de la solución, según datos del mismo estudio. A medida que los ciudadanos adquieren una mayor conciencia medioambiental, cambian también sus rutinas de consumo.
Ahora el 66% de los ciudadanos piensa si verdaderamente necesita un producto antes de comprarlo. Wallapop asegura que el 77% de los españoles separa la basura según su naturaleza y el 38% tiene previsto reducir su consumo de plástico de forma incremental en un futuro.
El cambio es lento, pero se está produciendo.