La Corte Interamericana de Derechos Humanos y la Corte Internacional de Justicia de la ONU lloran la muerte del exjuez Antonio Augusto Cançado Trindade, un icono en la lucha por los derechos humanos y una de las mentes más brillantes en materia de Derecho Internacional, área en la cual publicó numerosas y reconocidas obras jurídicas.
"Deja un verdadero legado en nuestra región y en el mundo entero", destacó el presidente de la Corte Interamericana, el juez Ricardo C. Pérez Manrique, quien recuerda que Trindade falleció en Brasilia a los 74 años. "Su trabajo ha impactado en la forma en que comprendemos el Derecho Internacional de los derechos humanos en la actualidad. Fue un verdadero humanista que puso siempre a las víctimas de las violaciones de derechos humanos en el centro de toda actuación internacional".
Cançado Trindade, nacido en Brasil, fue juez de la Corte Interamericana entre enero de 1995 y diciembre de 2006. Ascendió a la presidencia en dos ocasiones, en periodos que corren de 1999 a 2003.
"Su liderazgo fue decisivo para la consolidación del Sistema Interamericano de protección de los derechos humanos", añade Manrique. "Además, como profesor y jurista, formó e inspiró a miles de estudiantes y profesionales". Su compañero también destacó la motivación que supuso para él y todos sus compañeros tener a un hombre que brillaba por su "sencillez, inteligencia y sabiduría", tres cualidades que lo caracterizaban.
La cancillería brasileña también expresó sus condolencias a la familia del exjuez y señaló que fue uno de "sus más brillantes y dedicados juristas". Cançado Trindade trabajó codo con codo la administración del país latinoamericano entre 1985 y 1990, cuando fue consultor jurídico del ministerio de Relaciones Exteriores durante el gobierno de José Sarney.
"Permaneció fiel a sus ideas y, con una determinación incansable, dejó como legado una mayor humanización del derecho internacional", expresó en una nota el organismo institucional. Por su parte, el Tribunal Supremo de Brasil afirmó que las "lecciones y la inspiración" dejada por Cançado "son un legado valioso" para el país, para la corte y para el derecho brasileño.
Además de sus numerosos logros profesionales, Cançado recibió el Doctorado Honoris Causa por la Universidad Central de Chile, la Universidad Nacional de La Plata, la Universidad Americana de Paraguay, la Pontificia Universidad Católica de Perú y el título de Profesor Honoris Causa por la Universidad del Rosario de Bogotá y la Universidad Nacional Mayor de San Marcos.