Es probable que las marismas costeras, los manglares y las islas de arrecife no puedan seguir el ritmo del aumento vertiginoso del nivel del mar. El desbordamiento de las olas y la erosión costera podrían condenar a estos importantes ecosistemas costeros a ahogarse. Este es uno de los principales resultados de un estudio que se publica hoy en la revista Nature.

[La imagen que ha creado la NASA para ilustrar la dramática subida del nivel del mar en los últimos 30 años]

La investigación, que analiza la exposición de estos ecosistemas a varios supuestos de calentamiento global recogidos en los documentos del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC), refleja que en el escenario del calentamiento de 2 °C —el objetivo para limitar el calentamiento mundial respecto a niveles preindustriales establecido en el Acuerdo de París— la superficie de las marismas estaría expuesta a un aumento del nivel del mar de 4 mm cada año entre 2080-2100.

Y, en caso de darse un calentamiento de 3 °C, casi todos los manglares e islas de arrecifes de coral y el 40% de los pantanos mareales estarían expuestos a una subida anual del mar de más de 7 mm en el mismo período. De darse alguno de estos casos, es probable que las islas de arrecifes de coral se desestabilicen por el aumento de la erosión del litoral y el desbordamiento de las olas, y que las marismas y los manglares se ahoguen, señala el estudio. 

El equipo internacional de científicos detrás de esta investigación, capitaneado por Neil Saintilan, profesor de la Universidad de Macquarie, evaluó la vulnerabilidad y la exposición de 190 manglares, 477 marismas mareales y 872 islas de arrecifes de coral de todo el mundo al aumento del nivel del mar

[Superar el límite de 1,8 grados nos aboca a una subida del nivel del mar “inminente” e “imparable”]

"Esto demuestra la importancia del Acuerdo de París, cuyo objetivo es mantener el calentamiento dentro de los 2 °C e, idealmente, 1,5 °C", señala Torbjörn Törnqvist, coautor del estudio y catedrático de Geología Vokes del Departamento de Ciencias de la Tierra y Medioambientales de Tulane. "Está claro que esto supondría una enorme diferencia para los ecosistemas costeros”.

El investigador advierte que es necesario, de manera urgente, adoptar un cambio de rumbo para reducir la cifra a la que se terminará calentando el planeta. “Ahora mismo vamos camino de 2,4 a 3,5 °C de calentamiento para finales de este siglo”, destaca.

Un daño inevitable

"Colectivamente, estos ecosistemas se encuentran entre los más valiosos del planeta. Por ejemplo, la pesca mundial depende en gran medida de la salud de los humedales costeros y los arrecifes de coral", afirma Törnqvist. 

Millones de personas dependen de los servicios ecosistémicos del medio marino. Los manglares, las marismas, los arrecifes de coral, las praderas marinas y los bosques de algas son de vital importancia para la protección contra las tormentas y un sustento para actividades como la pesca o el ocio marino. Además, la vegetación marina reduce la fuerza de las olas y es hogar para cientos de especies. 

Incluso con un calentamiento global de 1,5 °C, apunta el estudio, algunas zonas costeras perderán la mayor parte de sus humedales a finales de siglo. En este escenario, la tasa probable de aumento del nivel del mar, según el estudio, se sitúa entre 2,4 y 6,4 mm al año. Esta cifra aumentaría en el caso de los centros de desarrollo contemporáneo de los manglares, en particular el Sudeste Asiático y el Caribe. 

[Kofradia y su lucha para que la pesca de bajura no 'muera' en Gipuzkoa: "Falta gente para trabajar en la mar"]

La zona del Caribe es especialmente vulnerable. Ya se están observando tasas más elevadas de aumento del nivel del mar a lo largo de la costa del golfo de México. Investigaciones previas de la Universidad de Tulane han demostrado que la tasa actual de aumento del nivel del mar podría "ahogar" las marismas de Luisiana, y posiblemente otras zonas de la costa del golfo, en unos 50 años.

Pero los autores del estudio son optimistas: "La pérdida comprometida de hábitats costeros en escenarios de calentamiento elevado no debe desalentar los esfuerzos de conservación y restauración". Y recomiendan en el documento cumplir los objetivos del Acuerdo de Paría para "reducir al mínimo la perturbación de los ecosistemas costeros". 

"Colapso ecosistémico"

"De manera crucial, los autores descubrieron que las marismas y los manglares se ahogarían con mayor probabilidad (P > 0,90) si el aumento relativo del nivel del mar superaba aproximadamente los 5-7 mm al año", indica Qiang He, del Key Laboratory of Biodiversity Science and Ecological Engineering Laboratory del Ministerio de Educación de China, en relación con los resultados de la investigación. 

Y alerta que "las conclusiones de Saintilan y sus colegas sugieren que los límites de aumento relativo de nivel del mar del espacio operativo seguro de los ecosistemas costeros —en el que el riesgo de colapso catastrófico del ecosistema— podrían estar acercándose rápidamente". 

[Las olas de calor abrasan los océanos: “Es como si hubiera un incendio en el Mediterráneo”]

Los expertos coinciden en que los ecosistemas costeros son muy vulnerables al aumento del nivel del mar. Pero hay otros factores que podrían amenazar su supervivencia. Un estudio, publicado en 2021 en la revista Frontiers in Marine Science, reconoció que el crecimiento de los arrecifes de coral peligra debido al calentamiento y la acidificación de los océanos. Cuando el agua está demasiado caliente, los corales expulsan las algas (zooxantelas) que viven en sus tejidos y se vuelven completamente blancos. Esto es lo que se conoce como blanqueamiento del coral, un fenómeno que les somete a mucho estrés e incluso pueden llegar a morir. 

Existen otros peligros para los ecosistemas marinos, más allá de las consecuencias del cambio climático. Buena parte están asociados a la actividad humana, como el estrés térmico, la modificación hidrológica, el enriquecimiento en nutrientes y la alteración de las interacciones entre especies.