La queja de los talibanes ante Naciones Unidas: tildan su exclusión de la COP28 como una "grave injusticia"
El gobierno interino afgano afirma que "la falta de ayuda internacional para adaptarse al cambio climático pone en riesgo a millones de afganos".
30 noviembre, 2023 13:39"Los delegados de Afganistán no han recibido una invitación para asistir a la 28ª Conferencia sobre el Cambio Climático de las Naciones Unidas", afirma Zabiullah Mujahid, portavoz del gobierno interino talibán. Esa exclusión, dice, es una "grave injusticia".
Así califica el portavoz talibán su ausencia en la COP28 celebrada a partir de hoy, 30 de noviembre, y hasta el 12 de diciembre, en la ciudad emiratí de Dubái. Según Mujahid, "la falta de ayuda internacional para adaptarse al cambio climático pone en riesgo a millones de afganos".
Esta exclusión corrobora que la comunidad internacional no reconoce al gobierno fundamentalista en Afganistán, algo que llevan intentando conseguir desde que tomaron el poder en el país en agosto de 2021. Desde ese momento, la mayor parte de la ayuda internacional ha sido bloqueada, incluyendo la relacionada con proyectos medioambientales.
Esa es, precisamente, una de las principales quejas del gobierno talibán, la escasez de ayuda humanitaria en un país colapsado por el conflicto. Esto, asegura en el comunicado compartido por EFE Mujahid, "es una grave injusticia contra el pueblo afgano, que no debería verse privado de su derecho a estas iniciativas".
El país menos adaptado
Según el Índice Mundial de Riesgo Climático de 2023, Afganistán es el cuarto país del mundo más vulnerable al cambio climático. Para la Oficina de la ONU para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA), la emergencia medioambiental está teniendo "efectos alarmantes" en el país.
Además, la agencia de Naciones Unidas recuerda que se trata del cuarto país menos preparado para enfrentarse y adaptarse al calentamiento global. Según la agencia EFE, el pasado abril, el Gobierno talibán calculó que más de mil personas murieron y otras dos mil resultaron heridas a causa de inundaciones repentinas, sequías, y otros desastres naturales durante los doce meses precedentes en Afganistán.
Y es que el país asiático vivió el pasado año su peor sequía en tres décadas y, ahora, vive por tercer año consecutivo la escasez de lluvias. Según la OCHA, "al menos el 60% de la población afgana depende de agricultura que necesita lluvia para prosperar", pero "la escasez de precipitaciones está empeorando la inseguridad alimentaria, la malnutrición y las enfermedades".
La desertificación, además, afecta ya a más del 75% del territorio afgano. Esto, según la OCHA, "acelera la degradación de la tierra y afecta a las cosechas", algo que viene ya ocurriendo desde hace al menos cuatro décadas.
El cambio climático en Afganistán no hace más que empeorar una de las mayores crisis humanitarias que vive el planeta ahora mismo. Y es que más de 29,2 millones de personas, es decir, dos tercios de la población, requieren ayuda humanitaria para sobrevivir.