Es indudable que, durante los últimos años, las economías más avanzadas hemos conseguido logros importantes en materia de sostenibilidad y medio ambiente. Hoy se puede afirmar que el proceso de descarbonización es imparable y que las medidas de la Agenda 2030 encaminadas a lograr los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) avanzan.
Unas metas sin duda ambiciosas, que se antojan prácticamente inalcanzables sin el papel e implicación de las empresas privadas. Larry Fink, fundador de BlackRock, en su ya prestigiosa carta anual a clientes, apuntaba que, si bien los gobiernos son los que deben liderar esta transición, las empresas y los inversores también juegan un papel relevante.
Soy consciente de que todavía queda mucho camino por recorrer. No todas las empresas establecen compromisos de igual alcance, ni claramente medibles ni cuantificables.
En el caso de Naturgy, sólo entendemos la gestión empresarial ligada al compromiso con la sostenibilidad y, desde hace ya mucho tiempo, alineamos nuestra gestión con los criterios ASG. De hecho, la compañía fue, hace ya más de dos años, una de las primeras en España en crear una Comisión de Sostenibilidad en el seno de su Consejo de Administración, como muestra del compromiso al más alto nivel.
Este compromiso está explicitado, con objetivos concretos y medibles, en nuestro Plan de Sostenibilidad. Sus líneas maestras están basadas en los ODS fijados por Naciones Unidas y sustentadas en los ejes de gobernanza y gestión ambiental, economía circular y ecoeficiencia, y biodiversidad y capital natural.
En este sentido, hemos profundizado especialmente en tres de los ODS. El objetivo 7, que promueve la garantía al acceso universal a una energía asequible, confiable y moderna, el aumento del uso de energías renovables y el fomento de la eficiencia energética. El objetivo 11, con la creación de una oferta comercial de productos y servicios que contribuyen a la eficiencia energética, a la reducción del consumo de nuestros clientes y a la mejora de la calidad del aire en las ciudades. Y el objetivo 13, con la adopción de medidas urgentes para combatir el cambio climático y sus efectos.
Según el informe de riesgos globales de 2020 del Foro Económico Mundial, los riesgos del cambio climático son los que tienen una probabilidad de mayor impacto en la economía global y en las empresas, en particular. Por eso, la transformación del sector energético es esencial y en Naturgy la asumimos como una verdadera oportunidad. Por ello, decidimos que nuestro Plan Estratégico 2021-2025 naciera desde un profundo compromiso en materia ASG.
Los riesgos del cambio climático son los que tienen una probabilidad de mayor impacto en la economía global y en las empresas
Ya en 2020, fuimos una de las primeras compañías españolas en anunciar el cierre de todas nuestras centrales de carbón, lo que implicó una reducción de nuestras emisiones de carbono en un 30% respecto a las de 2017. Y, además, lo hicimos lanzando planes de transición justa para minimizar el impacto social y económico local.
Nuestro objetivo es ser neutros en carbono en 2050 y tener una potencia instalada renovable cercana al 60% en 2025.
Pero, aunque es importante tomar compromisos, todavía es más importante cumplirlos. Así, durante 2021, nuestros avances en materia de reducción de emisiones siguen por el buen camino. En los nueve primeros meses la compañía registró un descenso adicional de las emisiones de gases de efecto invernadero de cerca del 12% como consecuencia de la mayor producción renovable.
También los compromisos de carácter social son importantes para todos los que trabajamos en Naturgy. Si durante los peores meses de la pandemia de la covid-19 la compañía lanzó una batería de medidas para apoyar a todos sus stakeholders, ahora hemos vuelto a dar un paso al frente. Ante la escalada de los precios del pool eléctrico, en septiembre anunciamos una primera iniciativa para reducir el impacto de la subida del precio de la electricidad en el consumidor doméstico.
Recientemente, hemos decidido ampliar esta iniciativa a las empresas, ofreciendo nuestra producción inframarginal a un precio de 65 €/MWh durante tres años. Se trata de la iniciativa Compromiso, una verdadera muestra de nuestra responsabilidad y sensibilidad con las necesidades reales de las familias y nuestras empresas.
Nuestro objetivo es ser neutros en carbono en 2050 y tener una potencia instalada renovable cercana al 60% en 2025
Esta valiosa vocación social se completa con la labor de Fundación Naturgy, que centra buena parte de sus esfuerzos en desarrollar los programas destinados a paliar la vulnerabilidad energética. Y lo hace a través de la rehabilitación de viviendas de familias vulnerables, la formación en materia de eficiencia y consumo energético, y el voluntariado energético. Además de sensibilizar y formar en materia de energía y medio ambiente.
Queda ya lejos de la gestión moderna de la dirección de empresas y de la mentalidad de los directivos de hoy, la visión que tenía el economista de la escuela de Chicago y premio Nobel, Milton Friedman. Él, que llegó a afirmar que el único objetivo de las empresas era maximizar los beneficios de sus accionistas.
Hoy la visión es diferente. El enfoque ha pasado de un capitalismo de shareholders a uno de stakeholders. Y Larry Fink lo rubricó a principios de este año: “Creemos que la sostenibilidad debe ser el nuevo estándar de inversión”. Una afirmación con la que en Naturgy nos identificamos plenamente, porque las empresas serán sostenibles o no serán.
***Francisco Reynés es presidente de Naturgy.