¿Sabes lo que es un problema retorcido? En 1973, los profesores Rittel y Webber, de la universidad de Berkeley, publicaron un artículo llamado Dilemas en la teoría general de la planificación donde presentaban la idea de que en una sociedad plural y compleja como en la que vivimos no se pueden presentar soluciones óptimas a problemas sociales, pues estos problemas son por definición muy complejos. Los bautizaron como: “Wicked Problems” traducido al castellano como “Problemas Retorcidos” o “Problemas Perversos”, no porque sean de naturaleza malvada, sino porque se resisten a una solución.
En 2015, la ONU adoptó una llamada a la acción global para dar fin a la pobreza, proteger el planeta, y asegurar que en 2030 todas las personas puedan gozar de paz y prosperidad: son los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).
Los ODS son una gran lista universal de tareas pendientes o, visto de otra forma, una lista de Problemas Retorcidos a los que nos enfrentamos globalmente como sociedad. Una de las características principales de los Problemas Retorcidos es que no pueden ser resueltos por un solo individuo o entidad, sino que necesitan de colaboración para su solución. Es por esto que es crítico el ODS 17 (Alianza para conseguir los objetivos)
Pero ¿cómo podemos saber si vamos hacia el mismo objetivo? Pues como lo haríamos en un viaje por carretera: debemos establecer nuestro punto de partida, objetivos y medir nuestro avance. Pero como además estamos hablando de Problemas Retorcidos en los que es necesaria la colaboración, debemos compartir estos datos, de forma que otros puedan construir y aportar sobre ellos. Algo así como nuestro GPS que nos ayuda en viajes a mejorar la experiencia ahorrando tiempo, evitando accidentes, encontrando puntos pintorescos o buenos restaurantes.
El camino del desarrollo sostenible es posible. Sin embargo, no siempre es el camino más fácil, más barato ni más rápido y eso hace que en ocasiones perdamos de vista la sostenibilidad. Por eso es aún más importante medir para verificar a lo largo del camino que no nos desviamos de nuestras intenciones de hacer lo correcto.
Los ODS pueden ser un acelerador de la innovación y, por tanto, del crecimiento
Para los 17 ODS se han definido 169 metas específicas, con 232 indicadores de medición. A nivel global se siguen estos indicadores, respondiendo a la pregunta de la sociedad: ¿Cómo vamos en el cumplimiento de los ODS? Es una visión de arriba a abajo, de lo general a lo particular.
Estos datos provienen de las decisiones y acciones del día a día de ciudadanos y empresas. Esa visión general se construye con el detalle cotidiano. Así, irremediablemente nos preguntamos: ¿Cómo sé lo que está aportando a los ODS lo que mi empresa, mi familia y yo mismo estamos haciendo? Esta visión es de abajo a arriba, de lo particular a lo general. Son distintas perspectivas de la misma información.
El caso de las empresas
Centrémonos en las empresas. Es necesario que incluyan en su estrategia su aportación a los ODS no sólo porque es bueno para la sociedad sino porque además las empresas sostenibles suelen tener mejores resultados (económicos, vinculación a clientes, empleados, y del ecosistema general) que las empresas no sostenibles, tal como lo demuestran varios estudios (más datos aquí). Los ODS pueden ser un acelerador de la innovación y, por tanto, del crecimiento.
Para lograrlo, se deben tener herramientas y metodologías que permitan encontrar el enfoque adecuado, y tomar decisiones informadas sobre cómo mejorar el bienestar de las personas y el planeta en su zona de influencia. E importante: compartir los datos con otros permite generar un valor conjunto e inalcanzable de forma aislada.
En este contexto surge nuestra propuesta. Estamos generando un conjunto de herramientas y métodos que permitan a todas las empresas establecer adecuadamente sus indicadores de aportación a los ODS. Un ecosistema y una plataforma tecnológica en la que se puedan compartir los datos generados desde las empresas e iniciativas privadas buscando siempre la colaboración útil.
Compartimos aquí un ejemplo de cómo se desarrollan estas acciones, haciendo foco en una de esas 169 metas. En primera instancia puede sonar poco: ¡Una de 169! Pero como hemos explicado, de lo particular se impacta en lo general. Estamos colaborando mediante la implementación de herramientas y metodologías para el objetivo 16.2: “Poner fin al maltrato, la explotación, la trata, la tortura y todas las formas de violencia contra los niños”. Quizás es una de las metas que tiene menos debate pues todos queremos proteger a los niños de estos actos atroces.
Poner fin al abuso sexual infantil
Aún así, hay una gran incidencia del consumo de pornografía infantil. Sólamente en el entorno laboral esta incidencia es alarmante: según un estudio realizado por la empresa NetClean, el ratio de utilización de dispositivos corporativos para el consumo de material de abuso sexual infantil es de 1 de cada 500 trabajadores.
La pandemia ha agravado esta situación generando la tormenta perfecta: millones de trabajadores trabajando desde casa y millones de niños escolarizados a través de dispositivos digitales. Con una mezcla de Inteligencia Artificial, análisis de datos y otras tecnologías se identifica sin lugar a dudas quien tenga en uno de estos dispositivos empresariales imágenes criminales y toman acciones para denunciarlo.
Tenemos las piezas adecuadas para crear una dinámica de colaboración activa, productiva y de impacto
Es decir, se identifica a los delincuentes actuales y se evita el uso futuro de los dispositivos para este fin. La colaboración con autoridades, empresas y otras organizaciones está siendo crítica para la evolución del impacto de esta solución, y conforme más se colabora, más eficientes somos en la prevención y actuación. Como podemos ver, comenzando con una meta concreta, con un uso inteligente y adecuado de la tecnología, y con la colaboración de los actores necesarios se generan acciones específicas y sobre todo, inmediatas con las que avanzamos en el dominio de nuestro Problema Retorcido.
Si alguna vez en la historia la generación de ecosistemas ha sido importante es hoy. Tenemos las piezas adecuadas para crear una dinámica de colaboración activa, productiva y de impacto.
España es conocida mundialmente por ser uno de los primeros países en donación de órganos. De la misma forma, podemos ordenar nuestra aportación a la solución de nuestros Problemas Retorcidos, mostrar a otros el avance real, y coordinarnos para eficientar este avance. Podemos hacer de este activismo ciudadano y cercano una identidad de nuestro país, que ya lleva en el ADN la colaboración, y juntos crear la evidencia de que estamos creando para nuestros hijos un mundo mejor que el que hemos recibido. Un mundo justo, con paz y prosperidad.
Si quieres conocer cómo colaborar en el desarrollo de la plataforma tecnológica y ecosistema para impulsar los ODS dentro de tu compañía, desde Women in Tech Spain ponemos a disposición nuestro email womenintechspain@gmail.com
*** Marisol Menéndez es líder de Women in Tech Spain, Chief Open Innovation Officer en South Summit y en Nordic Future Innovation. También es Advisor de Movizzon, Change Labs y Axyon AI, experta en Innovación Abierta y autora del método “3 dimensiones de la Innovación Abierta”.
*** Blanca Galletero es líder del grupo de Ciberseguridad, Inteligencia Artificial y Big Data en Women in Tech Spain. Es vicepresidente en Splunk, la plataforma para Data to Everything, donde lidera el equipo de GoToMarket, Alianzas y Ecosistemas.