La Fiscalía Anticorrupción no tiene previsto solicitar ninguna medida cautelar severa contra el exvicepresidente del Gobierno, Rodrigo Rato, durante la declaración ante el juez en calidad de imputado este martes. Por lo menos esas son las intenciones dentro del Ministerio Público, que aún así insiste que hasta que no se le interrogue la decisión última no está tomada.
Según fuentes fiscales consultadas por EL ESPAÑOL, por ahora no está entre los planes de Anticorrupción solicitar el ingreso en prisión del expresidente de Bankia ni ninguna fianza para eludirla. Sin embargo, insisten que todo dependerá de lo que declare como imputado ante el titular del Juzgado de Instrucción número 31 de Madrid, Antonio Serrano-Arnal.
Las últimas detenciones de su secretaria de toda la vida, Teresa Arellano, y un presunto testaferro, Miguel Ángel Montero, no deja en buena posición al exministro de Economía en la época de José María Aznar, a quien se le investiga por haber defraudado a Hacienda, haber cobrado comisiones ilegales blanqueadas en el extranjero y haber ocultado parte de su patrimonio en paraísos fiscales. En su caso, después de pasar dos días en los calabozos de la Guardia Civil, el instructor acordó su puesta en libertad con la obligación de acudir al Juzgado una vez al mes para asegurar su permanencia en territorio nacional.
A pesar de que el magistrado encargado de la investigación ha insistido en varias ocasiones que él no es el juez competente para llevar a cabo esas pesquisas, que son de suficiente entidad como para que las asuma la Audiencia Nacional, está continuando con la instrucción hasta que un tribunal diga definitivamente qué juzgado debe encargarse del caso.
Mientras el Tribunal Supremo resuelve la competencia, Guardia Civil y Fiscalía insisten en seguir tirando del hilo, principalmente en la parte de la causa que se encuentra bajo secreto de sumario y que se refiere a los delitos de blanqueo de capitales y corrupción entre particulares. Tras los últimos datos encontrados, los agentes citaron a Rato el pasado jueves en la Comandancia de Tres Cantos. Querían interrogarle por una serie de operaciones y entre sociedades sospechosas de ser manejadas por hombres de paja suyos.
Estas mismas declaraciones las tendrá que hacer este martes en sede judicial. Entre otros puntos, el exdirector del Fondo Monetario Internacional (FMI) tendrá que aclarar si, tal y como sostiene la investigación, evadió capitales y adjudicó contratos de manera irregular cuando era presidente de Bankia, por lo que habría recibido comisiones que acabarían e la mercantil alemana Bagerpleta GMBH, cuya actividad es la explotación de un hotel en Berlín, propiedad a un 50% de Rato. Por esas comisiones presuntamente ilegales, el juez ha imputado a cuatro directivos de dos compañías de publicidad, Zenith Media y Publicis, quienes habrían pagado a una sociedad propiedad de un testaferro de Rato a cambio de recibir campañas de publicidad en Bankia, precisamente cuando presidía Rodrigo Rato.
Desvió de dinero al hotel de Berlín
Otro de los hilos de los que están tirando los investigadores es la sociedad británica Vivaway Limited, propietaria de la mercantil española Kradonara 2001, constituida por Domingo Plazas, abogado vinculado a Rato y también imputado en la causa. Esta última recibió desde 2011 grandes cantidades devisas procedentes de Gibraltar, Reino Unido y Luxemburgo hasta un total de 6,5 millones de euros. Además, entre 2012 a 2014, la sociedad de Plazas recibió transferencias por un total de tres millones de euros de Vivaway Limited, mientras que esta última, a su vez, recibió transferencias por un total de 2,5 millones de euros de la sociedad panameña con sede en Ginebra Westcastle Corporation, declarada por Rato en su regularización de fondo a la Hacienda española.
Por otro lado se encuentra la sociedad Albisa, controlada por Alberto Portuondo, en prisión incondicional desde agosto por esta causa. Los investigadores apuntan que Rato habría cobrado las comisiones de las dos empresas de publicidad adjudicatarias de Bankia a través de esta sociedad, la cual habría realizado transferencias por un total de 450.000 euros a la sociedad encargada de la explotación del hotel de Berlín, Bagerpleta, propiedad al 50% de Rato a través de Kradonara y de otra mercantil, Rodanman Gestión, que comparte con su exmujer Ángeles Alarcó.
De las pesquisas se traduce que Rato, a través de diversas sociedades, habría nutrido de capital a la empresa alemana. Desde Kradonara se desvió un millón de euros e incluso desde Telefónica, compañía en la que Rato fue nombrado consejero en 2013, se desviaron 100.000 euros a Bagerpleta. Ante estos indicios, la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil ha analizado más ingresos a la sociedad alemana y ha descubierto que otras sociedades controladas por Rato pueden estar haciendo más ingresos a la empresa que explota el hotel de Berlín. Las últimas pesquisas apuntan a que el expresidente de Bankia habría desviado el cobro de conferencias a sociedades que a su vez realizarían transferencias a la alemana.