Alrededor de 3.500 efectivos procedentes de las Fuerzas Armadas y de la Guardia Civil desfilaron por el centro de Madrid en la celebración de la fiesta nacional. EL ESPAÑOL conversa con quince de ellos para conocer los motivos por los que se alistaron en el Ejército, sus inquietudes profesionales y personales.
1. Daniel Andrades Montesinos. 34 años, nueve en los Regulares
“Decidí entrar en los Regulares porque mi padre es oficial del cuerpo y, antes que él, lo era mi abuelo, que combatió en el Sáhara. Ahora yo soy teniente. En mi caso lo tengo claro: la sangre manda. Los Regulares son los más condecorados y es un orgullo ser uno de ellos. Venir a Madrid es, para nosotros, un orgullo”.
2. Enrique González Rúa. 41 años, 20 en las Fuerzas Armadas y 14 en la Legión
“Trabajé en una carpintería en Vizcaya hasta que me llamaron para hacer el servicio militar en Ronda (Málaga). Ahí descubrí que mi vocación eran las Fuerzas Armadas y decidí hacer carrera militar. Soy cabo en la Legión, cuerpo que elegí por su prestigio y tradición. Llevo muchos años viniendo al desfile del 12 de octubre, pero me siento como si fuese el primero”.
3. Manuel Flores Díaz. 45 años, 10 como reservista
“Mientras trabajaba en el campus universitario me enteré, a través de un compañero, que se abría convocatoria para entrar como reservista. Empecé en 2005 como suboficial y, desde 2007, soy oficial. Me hice reservista por servicio a mi país”.
4. Cristina García Rodríguez. 27 años, nueve en Infantería
“Soy la única con carrera militar en casa. Cuando dije que quería entrar en el Ejército todos me animaron. Formo parte del regimiento de Infantería Inmemorial del Rey nº1 y ojalá pueda desempeñar aquí toda mi trayectoria. Es una alegría desfilar en un día como hoy, que es el día de todos”.
5. Zara Armas Hernández. 26 años, seis en la Escuela de Suboficiales
“Soy de Tenerife y toda mi vida ha girado en torno al mar. Si quería hacer carrera militar no podía encontrar otro lugar mejor que la Escuela de Suboficiales (ESUBO), en Cádiz. Tenía amigos de Tenerife que formaban parte del cuerpo y que hablaban muy bien de él, así que me decidí a dar el paso con 20 años. Ésta es la primera vez que desfilo en el día de la fiesta nacional, siento muchos nervios de los buenos”.
6. Ulpiano Yrayzoz Noya. 31 años, 10 en el Ejército del Aire.
“Soy capitán de la Escuadrilla de Honores del Ejército del Aire (EDHEA). Es un orgullo desfilar en un día tan señalado, especialmente por las tradiciones que mantenemos. Pero este año encuentro una motivación todavía mayor para participar en el acto: mi hijo Rodrigo, de un añito, viene a verme por primera vez”.
7. Marcos Alonso Sánchez. 29 años, 11 en el Escuadrón de Zapadores Paracaidista
“Siempre me atrajo la idea del paracaidismo y la Escuadrón de Zapadores Paracaidistas me ofrecía la posibilidad de desempeñar mi labor en lo que me apasionaba. Estuvimos destinados en Afganistán y ahí tuvimos que vivir el día a día: eso te enseña a valorar más las cosas de la vida diaria. En mi casa, mi hermano y mi abuelo también tienen carrera militar”.
8. Víctor Lallana Sánchez. 30 años, cinco en la Armada
“Llevo cinco años sin venir a Madrid, donde nací, y por eso este día es todavía más importante para mí. Siempre me ha atraído el mar y por eso entré en la Armada. Ejerzo como marinero a bordo de la fragata Reina Sofía. Desfilar hoy es lo más grande que le puede pasar a un miembro de las Fuerzas Armadas”.
9. Cristina Rodríguez de la Hera. 30 años, ocho en la Armada
“Mi vocación militar -y especialmente por la Armada- viene de la admiración que siempre he tenido hacia el mar y de mi inquietud por conocer sitios y gente nueva. Llevo ocho años y medio en el cuerpo y ahora estoy destinada en la fragata Reina Sofía. Siento que todavía me queda mucho por conocer. Es un privilegio formar parte del desfile que hoy se celebra”.
10. Miguel Ángel Cortés Hoyos. Sargento primero en la Unidad de Emergencias
“Entré hace 23 años en las Fuerzas Armadas y después formé parte de la Unidad Militar de Emergencias -fundada en abril de 2006-. Ahora ocupo el cargo de sargento primero. Siempre he sentido vocación militar”.
11. Laura López Reverón. 22 años, cinco en la Academia
“Hoy vengo como abanderada. Mis padres y abuelos son militares, por eso decidí entrar en la Academia de la Guardia Civil, en Aranjuez. Es mi quinto año y soy la primera de mi promoción, la 62ª. Todavía no he decidido a qué especialidad me dedicaré, pero es importante trabajar día a día para poder dar siempre lo mejor de uno mismo. El año pasado fue el primero en el que participé en el desfile y sentí un gran orgullo, igual que en esta ocasión”.
12. Fernando Villanova Moya. 29 años, 10 en la Brigada Paracaidista
“Esta es la segunda ocasión que desfilo en Madrid. La primera fue cuando formaba parte de la tropa y ahora soy sargento. Aparte de la fatiga, cuando todo el mundo alaba a la Brigada Paracaidista o a la unidad se siente un orgullo que te viene de dentro y una energía que no te viene de ningún sitio. Sólo se puede describir quien lo vive dentro. Me alisté a los 19 años por pura vocación. Mi intención es aguantar hasta que me retire o hasta el cuerpo aguante”.
13. Carlos Lucas López. 26 años, ocho en el regimiento Arapiles 62
“Me siento muy orgulloso de desfilar hoy. Se pasan muchos nervios al ver a tanta gente, pero también mucha alegría y entusiasmo. Aunque mi familia está en Cádiz y no ha podido venir a verme se siguen sintiendo demasiadas cosas en un día como hoy. Ahora soy cabo y espero ascender pronto a sargento. De ahí, hacia arriba”.
14. Isabel Ortiga Montilla. 19 años, un año en la Academia General Militar
“Vengo de Córdoba y desfilar es lo más grande que le puede pasar a una persona. Es la primera vez que vengo y espero que no sea la última. Llevo un año en la academia. El ser mujer sólo supone un impedimento cuando una quiere que lo sea, pero, si se ponen ganas y esfuerzo, se convierte en la mejor profesión. No descarto salir de misión, pero aspiro a ser buen mando general”.
15. Nicolás López Cabrera. 37 años, dos y medio en los Regulares
"Siempre se hablaba de que los Regulares son el cuerpo más condecorado de las Fuerzas Armadas. Uno siempre aspira a lo mejor y por eso enfoqué hacia ellos mi carrera militar. Soy de Montevideo (Uruguay), pero me encuentro muy bien en Melilla, es una ciudad muy linda".