Sin mencionar el nombre del que fue su tesorero, el presidente del Gobierno ha reconocido este miércoles que se equivocó al enviar un SMS a Luis Bárcenas pidiéndole que fuera fuerte 48 horas después de que se publicara que escondía un botín millonario en Suiza. "Como cualquier ser humano, a veces se cometen errores", ha dicho Mariano Rajoy en un foro organizado por el diario El Mundo. "Yo ya he pedido perdón".
A menos de cincuenta días de las elecciones, Rajoy se resiste a anunciar la lista electoral con la que se disputará la Presidencia del Gobierno el 20-D y dice que es el partido, y no él, quien cierra la lista definitiva. El líder de los populares ha sorteado la pregunta de EL ESPAÑOL sobre si la secretaria general, María Dolores de Cospedal, ocupará algún número destacado de la lista por Madrid.
El jefe del Ejecutivo ha seguido exprimiendo la crisis catalana como filón electoral. El líder de los populares se ha felicitado de la buena sintonía que ha encontrado con el resto de fuerzas política a las que ha contado los pasos que seguirá para plantar cara al desafío secesionista y ha destacado que todos estén de acuerdo en garantizar "la unidad de España, la soberanía del pueblo español, la igualdad de los españoles y el respeto de la ley". Además, ha reconocido que el "acuerdo de mínimos" que ha cerrado con los principales grupos de la oposición es suficiente para garantizar la unidad de España y descarta firmar un documento donde todos se comprometan a remar en la misma dirección. "El documento más importante es la Constitución española, que está para cumplirla".
Fuego abierto con Cataluña
El jefe del Ejecutivo arremetió contra el Gobierno de Artur Mas y reconoció que "nos enfrentamos al mayor desafío que ha vivido nuestro orden constitucional". Así, dejó claro que el Gobierno catalán " desde el comienzo de la legislatura " no tuvo dinero para pagar a las farmacias ni para "hacer frente a las deudas que vencían o para pagar las nóminas de sus funcionarios". Ha sido el Estado, reconoció, el que ha estado aportando 49.000 millones de euros: "Ni España ni su gobierno ni sus instituciones son responsables de lo que allí pasa: ni de los escándalos, ni de la ruptura de la coalición de Gobierno ni de la desaparición del catalanismo moderado e integrador ni de dejar la gobernabilidad en manos de un partido abiertamente antisistema como es la CUP".
Se refirió también de los mecanismos que tiene el Estado para apagar este incendio, pero una vez más evitó pronunciar el artículo 155. "La única democracia digna de tal nombre es la que se fundamenta en el respeto de la ley. Y yo voy a velar porque así siga sucediendo", dijo.
Respaldado por su partido
En el evento, Rajoy estuvo respaldado por la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal; el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz; la presidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes, los vicesecretarios Javier Arenas, Andrea Levy y Pablo Casado; el director del CNI, Félix Sanz Roldán, la delegada del Gobierno, Concepción Dancausa y la presidenta del PP regional, Esperanza Aguirre, entre otros. Aprovechó el atril desde el que leía su discurso para avanzar los ejes de su programa electoral: "Avanzar en el empleo, crecer de manera sostenida y competitiva, fortalecer el Estado de las autonomías, reforzar los pilares del bienestar, culminar la mejora de nuestra educación, seguir modernizando la Administración y un compromiso permanente de regeneración de la vida pública". Son, a su juicio, los pilares que " marcan el camino" hacia una sociedad más cohesionada y con mayores niveles de igualdad entre sus miembros.
El candidato popular volvió a felicitarse de sus éxitos en gestión para destacar que el crecimiento y el empleo es "radicalmente incompatible" con la incertidumbre institucional o política y "mucho más" con un proyecto de ruptura del orden constitucional.