Algunos de estos cargos aparecieron en un artículo de La Vanguardia de 1998 sobre los nuevos nombres que adquirían fuerza en el partido. El titular del rotativo barcelonés, "Los jóvenes 'talibanes' de CDC", no dejaba lugar a dudas: una nueva generación marcadamente independentista que recelaba de la moderación de UDC pedía paso en el seno del partido. Ilustraba el texto una foto de un joven Josep Rull, hoy número dos de Convergència y candidato en todas las quinielas para suceder a Mas.
Es en la Ejecutiva del partido, órgano más numeroso, donde todavía existe un sector más moderado. Fuentes convergentes sitúan este grupo en un 15% o 20% de los miembros. Este sector, sin embargo, opta por no hacer ruido. Los dirigentes más conservadores prefieren criticar a la CUP en conversaciones privadas con periodistas o lanzar ataques velados al president desde los medios, tal y como sucedió el pasado jueves cuando se publicó en la portada de La Vanguardia las discrepancias dentro del Govern.
Quien manda sin ambages en CDC es un sector soberanista que controla el presente y el futuro de la formación. Estos son los principales miembros de la guardia independentista que formó Mas para controlar el partido durante la travesía soberanista.
Francesc Homs (Vic, 1969)
A falta de confirmarse las listas para el 20-D, Francesc “Quico” Homs se perfila como el hombre de Mas en Madrid. Durante años ha formado parte del círculo más cercano al president y ejerció de portavoz del Govern antes de que Neus Munté asumiera la vicepresidencia. Milita en el partido desde 1993, participó en las negociaciones del Estatut y actualmente es consejero de Presidencia en funciones. Se le considera uno de los “fontaneros” de CDC, ha dirigido varias campañas de Mas y conoce bien los cuadros intermedios después de ocupar durante años la secretaría general de asuntos interdepartamentales. Este lunes defendió “expulsar” al responsable de la filtración de la reunión del Govern del martes pasado.
Josep Rull (Terrassa, 1968)
Rull se convirtió en el hombre fuerte de CDC después de la renuncia de Oriol Pujol como secretario general. Su nombramiento en julio de 2014 se interpretó como un paso más hacia el independentismo de CDC. Curtido en las juventudes del partido (fue su secretario general entre 1994 y 1998) Mas le nombró “coordinador general” sin pasar por ningún congreso a pocos meses de celebrarse la consulta del 9-N. Abogado de profesión, se relaciona bien con los periodistas y no son pocos los que lo consideran el mejor colocado para suceder a Mas al frente del partido. Cuando CiU se rompió el verano pasado, algunos dirigentes de UDC responsabilizaron a Rull y a su convicción independentista como una de las causas del fin de la federación.
Neus Munté (Barcelona, 1970)
Abogada de profesión y experta en derecho público, Munté compaginó su militancia en CDC (desde 1996) con la pertenencia a UGT, donde desarrolló buena parte de su carrera entre 1996 y 2010. Su marcado discurso social contra la pobreza la ha situado como una de las personas de CDC que más podría gustar a la CUP. Munté, sin embargo, se mantiene fiel al president y ha negado reiteradamente que se vea como futura presidenta de la Generalitat. Asumió la vicepresidencia del Govern después de la ruptura entre CDC y UDC y desde entonces ha ejercido también de portavoz. En el consejo ejecutivo en el que se cuestionó la deriva de Mas ella se mantuvo en silencio y no criticó al president.
Jordi Turull (Parets del Vallès, 1966)
Los que creen que Josep Rull no acabará liderando CDC es porque piensan que será Jordi Turull quien acabará dirigiendo la formación. El líder del partido en el Parlament tiene fama de ser un hombre muy tranquilo, buen negociador y forjador de consensos. Consiguió en 2010 que el PSC se abstuviera para investir a Mas y suele encargarse de las relaciones con los partidos más beligerantes con CDC. Licenciado en derecho, se curtió en la función pública en distintos Ayuntamientos del territorio. Milita en el partido desde 1987 y conjuga una mezcla de independentismo y moderación que le ha valido el apoyo de viejas glorias del partido.
Lluís Corominas (Castellar del Vallès, 1963)
Corominas compartió el liderazgo del partido con Rull hasta que Mas se decantó por este último. Exalcalde de su municipio, Castellar del Vallès, desde 1992 a 2004, también es licenciado en derecho. En CDC se le considera un hombre de partido, muy cercano a Mas, que empezó a hacerse fuerte en la formación después de que CiU perdiera la Generalitat en 2003. Precisamente ese año entró como diputado en el Parlament y aún transita por los pasillos de la cámara. Exjugador y entrenador de baloncesto, actualmente es vicepresidente primero de la Mesa.