El ministro de Defensa, Pedro Morenés, ha aterrizado este lunes en Mali para expresar su apoyo a los 110 efectivos españoles desplegados sobre el terreno, cuya misión es la de adiestrar a las tropas locales para combatir el yihadismo del Sahel africano. Morenés aterriza, precisamente, diez días después de que varios terroristas asaltaran un hotel de la capital, Bamako, que se saldó con la muerte de 21 personas. El viaje se ha mantenido en secreto por motivos de seguridad.

El avión en el que viajaba el titular de Defensa ha aterrizado en la base aérea de Bamako. Allí se ha reunido con el ministro de Defensa maliense, Tieman Hubert Coulibaly, y ha saludado al coronel José Luis Sánchez, al frente del contingente español. Después ha viajado hasta la localidad de Koulikoro, donde se erige el campo de entrenamiento en el que están desplegados alrededor de cien de los 110 efectivos.

La fuerza internacional que opera en la región, liderada por Francia, ha tratado de contrarrestar los envites de las fuerzas tuareg con aspiraciones independentistas sobre el norte del país. En los últimos años, la misión ha evolucionado en la lucha contra el yihadismo: al menos una veintena de grupos tratan de hacerse con el poder de determinadas regiones bajo el pretexto de la expansión del Islam. Según ha declarado Morenés, la misión de Mali "engrandece a España", un país que es "ejemplo de contribución a la lucha contra el terrorismo internacional".

La misión de la Unión Europea está ahora bajo el mando del general de brigada alemán Xaver Pfrengle, que relevó en agosto de 2015 al militar español Alfonso García-Vaquero. Según apuntan desde Defensa, la rebelión tuareg, seguida por un golpe de estado militar y la entrada de terroristas yihadistas han convertido a Mali “en un centro de inestabilidad y en una grave amenaza para toda la región del Sahel y para Europa”.

La visita de Pedro Morenés se produce en pleno debate sobre cómo debe afrontar Europa, en términos militares, la lucha contra el yihadismo. Francia, que ha pedido ayuda en este escenario a los Estados miembro de la Unión, agradecería un respaldo internacional en las misiones desplegadas en África para así concentrar sus esfuerzos sobre Siria.