La red del expresidente del PRI, Humberto Moreira, detenido esta viernes en Barajas por orden de al Audiencia Nacional, utilizó Estados Unidos para blanquear parte de los 246 millones de euros (3.000 millones de pesos) presuntamente robados en el estado mexicano de Coahuila. Así al menos lo refleja la confesión de uno de sus testaferros ante la Corte del Distrito de San Antonio, en Texas, a la que ha tenido acceso EL ESPAÑOL.
Parte de los fondos, según la investigación abierta por EEUU, terminaron en cuentas abiertas en Bermudas por los colaboradores del mandatario mexicano. Ahora, el juez Santiago Pedráz, investiga a instancias de la Fiscalía Anticorrupción si parte de esos fondos, detraídos de forma ilegal de la administración mexicana, fueron enviados después a España para entrar de nuevo en el curso legal. Tal y como ha avanzado este diario, Moreira ha sido imputado por delitos de blanqueo y malversación y aguarda todavía para prestar declaración judicial.
Según la documentación consultada por este diario, el 30 de abril de 2014 la Corte de San Antonio anunció el procesamiento del empresario Rolando González-Treviño. El industrial fue acusado en EEUU de blanqueo de dinero por mover fondos de cuentas del gobierno de Coahuila, y utilizarlos después para comprar medios de comunicación locales.
Poco después, varios de los implicados se trasladaron en avión privado desde Coahuila hasta Texas. Allí cerraron un trato para mover 25 millones de pesos mexicanos. Fue el primero. Desde entonces, las cuentas de González-Treviño abiertas en el First National Bank de Edimburgh (Texas) recibieron varias transferencias desde sociedades cercanas a la presunta red corrupta. Empresas como Diam Ante, con cuentas en Banorte y que remitieron tres transferencias por más de medio millón de euros.
Un mes después de este anuncio, González-Treviño alcanzó un pacto con la fiscalía estadounidense y se declaró culpable. En su confesión, el empresario señala a Moreira como máximo responsable del saqueo público. La documentación judicial lo refleja de forma confidencial, al identificar al exmandatario mexicano como CC1 (Co-Conspirator One). Según el documento, CC1 es un exfuncionario que llegó al gobierno de Cohauila en 2005 y estuvo hasta 2009. En esas fechas, era el ahora detenido en España quien ocupaba el puesto.
Cuentas en Bermudas
De forma paralela, la Justicia de EEUU ordenó una acción civil para bloquear los fondos -más de dos millones de dólares- de la cuenta número 26-2673-031320, abierta en el Butterfield and Son Limited Bank de Bermudas. El dinero estaba relacionado según la documentación a la que ha tenido acceso EL ESPAÑOL, con Hector Antonio Villareal Hernández, secretario de Finanzas del gobierno de Humberto Moreira en Coahuila. En aquellas fechas, el sueldo público de Villareal ascendía a más de 8.000 dólares mensuales. La cantidad es abultada, pero no suficiente según la documentación librada por EEUU como para justificar la existencia de los fondos en Bermudas.
El colaborador de Moreira fue arrestado en México el 29 de octubre de 2011, y fue entonces cuando las autoridades mexicanas cifraron el desfalco en 246 millones de euros. Según la investigación local, parte del dinero salió de la administración por medio de falsos préstamos procedentes del gobierno federal. Villareal fue acusado de quedarse con al menos 35 millones de dólares y trasladar el dinero a cuentas en EEUU.
La investigación de EEUU confirma que el alto cargo del gobierno de Moreira abrió en esas mismas fechas la citada cuenta bancaria en Bermudas. El dinero llegaba al paraíso fiscal por medio de transferencias realizadas desde otra cuenta del JP Morgan Chase Bank. Entre agosto de 2009 y abril de 2011, el depósito recibió seis transferencias que suman casi cuatro millones de euros. Además, compró propiedades inmobiliarias en San Antonio, Brownsville y South Padre Island.