La creación de las comisiones parlamentarias en el Parlament ha puesto en marcha la tramitación de normas que probablemente chocarán con el ordenamiento jurídico español. En el plazo de 30 días, comenzará el desarrollo parlamentario de tres leyes que la Generalitat considera básicas para llevar a cabo la “desconexión” con España: la ley de Transitoriedad Jurídica, la de creación de Estructuras de Estado (Hacienda catalana y Seguridad Social) y la del Proceso Constituyente.
El acuerdo entre Junts pel Sí (JxS) y la CUP aprobado en la declaración rupturista del 9 de noviembre (suspendida por el Tribunal Constitucional) preveía que estas normas empezarán a tramitarse antes de 30 días, si bien la portavoz de JxS Marta Rovira ha precisado que no se aprobarán de manera inmediata. Rovira ha asegurado que estas leyes no pasarán por el pleno del Parlament hasta el final de la legislatura.
Según Rovira, cabe la posibilidad de que la Ley de Transitoriedad Jurídica pueda contener en sus primeros artículos la declaración de independencia, aunque esta última también podría ser tramitada aparte, y lo que sí que ya da casi por seguro es que incluirá una "Constitución catalana provisional muy básica", que únicamente tendrá vigencia hasta que fuese eventualmente aprobada la Constitución "definitiva" en un posible referéndum.
Por lo que respecta al denominado "proceso constituyente", los partidos y las principales entidades independentistas de la sociedad civil catalana -como la Asamblea Nacional Catalana (ANC) y Òmnium Cultural- ya han empezado a organizar actos para debatir los aspectos que debería incluir la futura Constitución catalana. Esta misma tarde se ha presentado en el Colegio de Periodistas de Barcelona una propuesta de Carta Magna para un Estado catalán, que cuenta con el apoyo del exjuez y senador por ERC Santi Vidal.