Pedro Sánchez y Albert Rivera se reunieron por primera vez desde que el rey encargó al líder socialista formar Gobierno. Hubo sonrisas, buena disposición y la reunión en el Congreso de los Diputados fue larga, de alrededor de una hora y media, pero ningún indicio de que estén dispuestos a relajar sus vetos a la investidura.
Ambos comparten la convicción de que es necesario un acuerdo para tratar de formar Gobierno y los dos repiten, con distintas formulaciones, que es más lo que les une que lo que les separa. Sin embargo, sus estrategias siguen siendo como dos líneas paralelas condenadas a no tocarse jamás. “Lo que necesita el PP es pasar a la oposición, renovarse y reenerarse”, dijo Sánchez, que rechaza negociar con el partido con más escaños en pos de un acuerdo de investidura, como le pide Rivera. El líder de Ciudadanos también descarta “absolutamente” un pacto en el que participe Podemos. “No se me ocurre pensar que Podemos deje de ser Podemos”, lamentó en su comparecencia, al ser preguntado por este diario. “El señor Sánchez sabe lo que pienso sobre eso”, añadió.
Ambos líderes se reunieron mientras el presidente del Gobierno comparecía ante sus diputados para advertir de que o Sánchez se aviene a negociar un acuerdo que le permita seguir en la Moncloa o la repetición de las elecciones es inevitable.
A pesar de que las posiciones expresadas por Sánchez y Rivera no ofrecen una posibilidad aritmética que permitan investir a un nuevo presidente, ambos han acordado que sus equipos negociadores comiencen a negociar. Coinciden en cinco ejes generales que tampoco han concretado: paro, economía y fiscalidad, regeneración democrática y lucha contra la corrupción, reforma constitucional y Europa.
Este viernes por la tarde, los equipos del PSOE y de Ciudadanos celebrarán la primera reunión, horas después de que Sánchez se reúna con Pablo Iglesias, el líder de Podemos.
Los líderes del PSOE y Ciudadanos también están de acuerdo en que Rajoy debe comparecer en el pleno para que se debata la posición de España sobre la salida del Reino Unido de la Unión Europea, un asunto que se tratará este mes en una cumbre monográfica de jefes de Gobierno. Si logran el concurso de Podemos, al presidente del Gobierno en funciones no le quedará más remedio que comparecer, ya que los tres partidos tienen mayoría en la cámara.
Sin embargo, no parece que esa misma mayoría esté cerca de cristalizar en un acuerdo de investidura.