El compromiso que Ciudadanos ha adquirido con el PSOE no se romperá el 5 de marzo, el día que Pedro Sánchez necesitará el respaldo de al menos la mayoría simple del Parlamento para ser presidente del Gobierno. Mariano Rajoy espera tranquilamente su turno que llegará, a su juicio, el día después de que el socialista no consiga la investidura. Pero esas cuentas sólo cuadran en el Partido Popular. El líder de los conservadores aún no ha asumido que el acuerdo que Albert Rivera ha firmado con Pedro Sánchez va mucho más allá de esta primera sesión de investidura.
Desde el 2 de marzo, el día de la primera votación, el cronómetro por fin se pondrá en marcha. Los líderes de los grupos parlamentarios tienen, a partir de entonces, dos meses para intentar conseguir un apoyo suficiente de la Cámara como para que el Rey vuelva a proponer otro candidato que lo intente. Es en este escenario donde entraría en juego el PP, que desde el 20D solo cuenta con el apoyo de sus 122 diputados. Sin embargo, están convencidos de que si Sánchez se estrella la semana que viene, los socialistas se verán obligados a aceptar un pacto a tres. Una previsión que no entra en la agenda ni de PSOE ni de Ciudadanos.
Fuentes internas de la negociación entre Rivera y Sánchez consideran que el turno de Mariano Rajoy “ya ha pasado” y le advierten de que, si la semana que viene el acuerdo no da como fruto la investidura de Sánchez, el secretario general del PSOE “seguirá teniendo el apoyo de Ciudadanos”. Los cálculos que hacen los nuevos socios es que, si el Rey inicia una nueva ronda de contactos, Rajoy sólo puede ofrecer el apoyo de su grupo parlamentario. “Sánchez suma ya de entrada 130, porque seguirá teniendo el respaldo de Ciudadanos. Son más apoyos que los 123 diputados de Rajoy”.
Con esta unión, que se plasmará en un documento que firmarán Pedro Sánchez y Albert Rivera una vez que los dos hayan recibido el beneplácito de sus respectivas ejecutivas, el socialista partiría con ventaja en el segundo intento de acudir a otra sesión de investidura en el caso de que falle la primera. “El Rey tendrá que proponer de nuevo a Pedro Sánchez porque irá a Zarzuela con más apoyos que nadie”, aseguran las mismas fuentes.
El acuerdo entre PSOE y Ciudadanos
El documento que plasma el acuerdo entre las dos formaciones recoge la modificación del artículo 135 de la Constitución para que los derechos sociales queden blindados y la Sanidad sea reconocida como un derecho fundamental. En materia fiscal, han acordado no subir el IRPF ni modificar el IVA con un propósito: "Que la clase media trabajadora no pague más impuestos". Además, consideran que el IVA cultural tiene que reducirse hasta el 10%.
Ciudadanos ha conseguido que el PSOE incluya en materia laboral algunos de los principios del contrato único que tanto ha defendido Rivera "para combatir la dualidad y la temporalidad". También se recogerá un punto casi idéntico al complemento salarial que proponía la formación naranja, aunque con una partida económica destinada a la exclusión social y a la pobreza infantil.
Reformar el Senado, limitar los mandatos a dos legislaturas, reducir a la mitad el número de miembros del Consejo General del Poder Judicial y eliminar las diputaciones a cambio de "consejos provinciales con alcaldes" forman parte también de la base del acuerdo. "Algunas de estas reformas se tendrán que hacer en seis meses. Otras, a lo largo de la legislatura", explicaban fuentes de la negociación que resumían con un "¡lo que ha costado!" el anuncio definitivo del acuerdo.
“Fallo estratégico”
Las mismas fuentes de los equipos negociadores que trabajan a destajo para intentar acercar posturas critican el inmovilismo del Partido Popular. “Rajoy no quiere hablar con nadie hasta el día 6 de marzo y tuvo que haber hablado hace semanas, hace meses. Es muy tarde”, reconocen las mismas fuentes, que afean al PP que, por no hacer, ni siquiera haya sido capaz de designar a los 'hombres del partido' que trabajasen para intentar recabar los apoyos que necesitan para que su candidato sea presidente.
El 'no' que Mariano Rajoy dio al Rey cuando le propuso ir a la primera investidura ha sido un “fallo estratégico monumental sin precedentes” que deja al líder del PP sin bazas para intentar convencer a algún partido de que le apoye en una segunda sesión de investidura. “¿Qué va a vender ahora, que él ganó las elecciones?”, critican. El primer escollo que tendrá que sortear es cómo explica a los españoles que vota en contra de un acuerdo entre PSOE y Ciudadanos “cuando se proponen temas tan importantes como la reforma constitucional, limitar mandatos, eliminar aforamientos, no bajar los impuestos”.
Será el tiempo, creen los actuales socios, el que impondrá a Mariano Rajoy “que debe abstenerse para que gobierne” Sánchez en coalición con Albert Rivera. La posible abstención de los 69 diputados que tiene Podemos es imposible, ya que el acuerdo que han firmado PSOE y C´s incluye recoger por escrito prohibir los referéndum en Cataluña “ahora y siempre”. Es el punto estrella del programa de Pablo Iglesias, al que dan por hecho que no renunciará: “Si Podemos está dispuesto a dejar de ser Podemos, entonces sí se abstendrá”.
“La suma no da”
Desde la sede central del PP, ha sido el vicesecretario de Organización, Fernando Martínez-Maíllo, el que aprovechó las redes sociales para fijar criterio contra el pacto entre PSOE y Ciudadanos. “Afortunadamente, la suma no da”. Y adelantó uno de los problemas con los que se encontrará Pedro Sánchez en su propio partido. “¿Qué opinarán los presidentes de Diputación socialistas y sus diputados del acuerdo con Ciudadanos? Lo sabremos pronto...”.
El PP cree que, si Sánchez fracasa, el PSOE no tendrá más remedio que aceptar la oferta que ha lanzado insistentemente Rajoy de formar una gran coalición donde estén presentes miembros de los tres partidos, que suman más de 250 diputados. Pero esta teoría responde simplemente a un deseo y se aleja cada día más de una realidad. “Mariano Rajoy volverá a ser presidente del Gobierno única y exclusivamente si se disuelven las Cortes y el PP gana las elecciones por mayoría absoluta… o roza esa mayoría. Si no, no lo será”, aseguran fuentes inmersas en la negociación entre PSOE y Ciudadanos. Porque el acuerdo entre Sánchez y Rivera, insisten, va mucho más allá de una simple votación de investidura.