Joan Jover fue el gestor de las cuentas de toda la familia Pujol desde 2001 hasta 2010, cuando abandonaron el Andbank para irse a la competencia, la Banca Privada de Andorra. En este tiempo, él era el encargado de realizar las transferencias y entregarles los reintegros que solicitaban. Este trabajador del banco andorrano aseguró ante el juez de la Audiencia Nacional José de la Mata que la mujer del ex presidente catalán, Jordi Pujol i Soley, utilizaba a terceras personas a modo de “cartas chófer” para sacar dinero o hacer transferencias desde su cuenta del Principado.
A pesar de que Jover no se acordaba de la inmensa mayoría de los datos preguntados por el instructor, sí aseguró que durante los nueve años que trabajó para la familia Pujol nadie le comentó que el origen del dinero guardado en sus cuentas se tratara de una herencia familiar, ni paterna ni materna, contrariamente a lo afirmado por cada uno de los miembros del clan, quienes han asegurado por activa y por pasiva, tanto en el Juzgado como en el Parlamento catalán, que todo el dinero guardado en Andorra provenía de una herencia del abuelo Florenci Pujol.
En su declaración como testigo en la causa que se investiga el patrimonio familiar así como los negocios del primogénito, Jordi Pujol Ferrusola, Jover manifestó que cada hermano gestionaba su propia cuenta y ninguno de ellos tenía como apoderado a su hermano mayor. La tesis familiar es que cada uno de ellos abrió una cuenta en la que Jordi junior hacía transferencias e ingresos en efectivo como reparto de la herencia del abuelo Florenci.
“¿Asumía Jordi Pujol Ferrusola la gestión de sus hermanos?”, le preguntó De la Mata en el interrogatorio celebrado en Andorra, donde se trasladaron el instructor y la fiscal para las declaraciones. “Yo no vi eso”, aseguró el gestor de Andbank durante el interrogatorio, al que ha tenido acceso EL ESPAÑOL. “Todos los hermanos tenían cuenta. Más tarde o más temprano vinieron todos y nos íbamos viendo temporalmente”, explicó.
Marta Ferrusola también tenía una cuenta en Andorra. “Yo no llegué a ver nunca a la madre. Los pocos movimientos que hay en la cuenta es a través de una carta chófer. Viene un apoderado, con un poder para que haga la transferencia”, señaló el testigo.
Jover no pudo decir quiénes eran las personas que iban en nombre de Ferrusola a hacer los movimientos, aunque aseguró que una de ellas era su propio hijo mayor. El testigo manifestó que Jordi Pujol Jr no era autorizado en la cuenta de su madre pero sin embargo éste sí le autorizó para hacer movimientos puntuales, como la propia cancelación de la cuenta.
El gestor explicó que las órdenes al banco se hacían normalmente de manera presencial, aunque alguna de ellas las enviaran por fax o las ordenaran por teléfono. Con quien más relación mantuvo fue con el hermano mayor, al ser quien más actividad tenía en sus cuentas.
El banco no controló el origen
Las cantidades que movía el mayor de los Pujol eran bastante considerables. Sin embargo, el banco nunca preguntó el origen de sus fondos. De la Mata preguntó a Jover por un ingreso de un millón de euros en metálico hecho por el primogénito del ex presidente catalán. “Se daba por hecho que tenía capacidad de producción de ese dinero. No se pedía ningún documento acreditativo del origen de los fondos”, explicó el gestor.
“¿Recibían el dinero y para dentro?”, le preguntó el magistrado. “Sí. No se pedía ninguna justificación”, añadió el testigo.
Ante las continuas evasivas del gestor y sus continuas lagunas, el magistrado tuvo que recordarle que por su condición de testigo está obligado a decir verdad. Le preguntó por una cuenta titularidad de Pujol Ferrusola y su mujer, Mercé Gironés, en la que hubo varias salidas de dinero de cerca de un millón de euros cada una entre los años 2002 y 2003. Entre los datos enviados por Andorra en la comisión rogatoria requerida por el Juzgado aparece una carta firmada en abril de 2003 por el titular de la cuenta para que se entregue al portador de este documento un millón de euros. “¿A quién le entregó un millón de euros?”, le preguntó De la Mata. “No lo sé”, respondió.
“¿No sabe a quien dio un millón?”
“No me creo que usted le diera un millón de euros en metálico a un individuo cualquiera que le viniera con una papela así”, le espetó el juez. “Es que no me acuerdo”, insistió. “No me entra en la cabeza que llegue una persona cualquiera con una papela y usted le entrega un millón de euros”, siguió el magistrado. Finalmente, concluyó que la orden para entregar el dinero a una tercera persona vino de 'Jordi Jr'.
El banco no es sólo que no controlara el origen del dinero que manejaba la familia Pujol sino que, según se desprende de las preguntas del juez, colaboró con ellos para facilitar cuentas ocultas y evitar que apareciese el nombre del cliente real, como la cuenta 'Diplomatic' o la cuenta 'Turmani'. “Cuando se recibían transferencias destinadas a Pujol, ¿sería que venían a nombre 'Diplomático' y vosotros, que lo sabíais, a continuación reenviabais esa cantidad a su legítimo titular, en ese caso Jordi Pujol Ferrusola?”, preguntó De la Mata. “No me acuerdo”.
El millón de Pujol i Soley
Sobre la cuenta abierta por 'Jordi Jr' y en la que se sospecha que, en realidad, hacía de testaferro de su padre mientras este era presidente de la Generalitat, Jover explicó que siempre creyó que el titular era el hijo mayor del ex dirigente catalán. Sin embargo, sí explicó que la firma autorizada sólo la pueden estampar los titulares.
La tesis de los investigadores es que el titular era Pujol i Soley, entre otras razones, porque se aportó al banco una nota manuscrita reconociendo que la cuenta era suya y rubricaba el mensaje con su firma oficial y con la firma bancaria, que consiste en escribir el número de cuenta en letra.
El titular de la cuenta ordenó el 28 de octubre de 2010 sacar un millón de euros en metálico a través de la firma autorizada, orden que según los investigadores habría dado el propio Pujol i Soley. Sin embargo, Jover no pudo recordar quién dio la orden y quién se llevó el dinero.