Mariano Rajoy no ha hecho ninguna referencia a la dimisión el viernes del ministro de Industria, José Manuel Soria. En una intervención de más de 30 minutos en una convención sobre educación del PP en Zaragoza, el presidente en funciones no ha encontrado ningún momento para comentar la salida de su ministro; ni siquiera cuando ha destacado la regeneración democrática. Soria dimitió este viernes tras mentir sobre la aparición de su nombre en los Papeles de Panamá y en empresas en paraísos fiscales.
Soria es el quinto ministro que deja el gobierno de Rajoy desde 2011, tras Ana Mato, Alberto Ruiz Gallardón, José Ignacio Wert y Miguel Arias Cañete. Solo Mato, como Soria, se fue por un escándalo de corrupción. Ninguno ha sido cesado directamente por el presidente.
El presidente en funciones ha centrado su discurso en criticar los intentos de otros partidos de formar gobierno y en hacer una lista de propuestas en educación, que parecían una lista preelectoral. Rajoy ha insistido una vez más que en todas las elecciones salvo en la última el partido ganador ha podido gobernar, con apoyos o en solitario. Ha vuelto a ofrecer a Pedro Sánchez su gran coalición, “que sigue vigente desde el 21 de diciembre”. El líder popular ha pedido a Sánchez que “deje su actitud mendicante” con Podemos, nacionalistas e independentistas.
Rajoy ha aprovechado para seguir con su personal precampaña. Ha criticado como “ingeniería financiera” el pacto de PSOE con Ciudadanos. En un mensaje que irá creciendo si las elecciones se confirman, ha unido a Ciudadanos con el partido socialista: “Ciudadanos dice que mi candidato es Sánchez y mi programa es del PSOE. Malo para todos, pero sobre todo para la aritmética”.